Sindicales

15/8/1996|506

Zona Sur del GBA: Manifestaciones políticas de masas

El paro del 8 dió lugar a una gran manifestación de masas. En la Plaza Alsina de Avellaneda se dieron cita mil trabajadores y jóvenes a los que se sumó luego la columna de la zona oeste encabezada por el CTA. 


La juventud


El hecho relevante fue la presencia de los estudiantes secundarios organizados en la flamante ‘asamblea estudiantil’, cuya columna compacta y aguerrida despertó el aplauso general.


Los secundarios se hicieron sentir no solo por su número sino por sus cánticos —“huelga general”, “plan de lucha”. Llegaron a interrumpir varias veces el discurso del secretario general de ATE: “De Gennaro escucha, queremos plan de lucha”. El reclamo fué sumando adeptos entre los concurrentes, y la consigna se fué “perfeccionando”: “se va a acabar con un plan de lucha nacional”.


El activismo obrero


Aunque el paro en las escuelas fué masivo, SUTEBA no se esforzó en constituir una columna, llevó carteles pero sin gente. Un grupo de activistas de Aurora se hizo presente enarbolando una bandera de la fábrica.


Todos los manifestantes confluyeron finalmente en Quilmes, donde se concentraron 10.000 trabajadores, jóvenes, desocupados y pobladores de los barrios, revelando las poderosas tendencias a convertir el paro en un terreno de movilización política.


Hubo una batalla que no se expresó en la movilización pero tuvo importancia clave. En plantas y talleres en los que no se paraba desde hace mucho tiempo, el activismo impulsó la huelga a pesar de la pusilanimidad o la ausencia de la burocracia. Un caso fué Estrada, una gráfica de 150 compañeros que por muchos años no acompañó las luchas del movimiento obrero y que ahora acató en un 75%. Un corresponsal señala el papel jugado por un sector del cuerpo de delegados (ligado a la Naranja) que impulsó asambleas y se empeñó en un debate en cada rincón de la planta, en tanto el sindicato (Lista Verde ongarista) “se negó a llamar al plenario de delegados para impulsar el paro y se limitó a enviar un comunicado de adhesión el día anterior”.


Desocupados


Doscientos compañeros se hicieron presentes en la olla popular del cruce de Varela, organizada por la Coordinadora de Desocupados de Berazategui. Junto a una mayoría de trabajadores desempleados, estuvieron estudiantes de la Media 6 de Berazategui, delegaciones de las seccionales Varela y Berazategui del Suteba y de partidos políticos. La olla estuvo rodeada por carteles que reclamaban los 500 pesos de subsidio, el no pago de impuestos para los desocupados y el rechazo al corte de servicios.


Esta olla es la segunda que organizan y forma parte de una campaña. Flores, integrante de la Coordinadora, nos dece que “vamos a seguir con otras ollas todos los lunes para que el gobierno sepa que existimos”. José y Miguel, también de la Coordinadora plantean como  tarea clave “juntar a las organizaciones de desocupados del conurbano para establecer acuerdos en asambleas y hacer un plan de lucha. Impulsamos un congreso nacional de desocupados”.