Sociedad
14/8/2023
Comer asado es 25 veces más caro que hace ocho años
Alimentos básicos que aumentaron hasta cuatro dígitos en ese período.
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La devaluación y el dólar agro seguirán disparando el precio de la carne.
La causa del retroceso electoral de las fuerzas políticas que vienen gobernando el país podría resumirse a que todas ellas se encargaron de hundir los ingresos populares, condenando a las mayorías a innumerables privaciones. Sin ir más lejos, entre las Paso de 2015 y las de 2023, varios alimentos básicos sufrieron aumentos de hasta cuatro dígitos.
Según un informe elaborado por Infobae, en base a datos del Indec, en ese período productos como el café aumentaron 7.550%, el azúcar 6.050%, el aceite 5.838%, el pan 3.783%, el kilo de asado 2.400%, la leche 1.617% y la yerba 1.160%. En cambio, el salario de la población trabajadora ha evolucionado por detrás de esos porcentajes.
Aquí se combinan el dominio privado de el comercio exterior y la preeminencia del agronegocio con las remarcaciones constantes que realizan las empresas alimentarias. Un esquema que ningún gobierno se propuso alterar. Lo anterior, sumado a los saltos cambiarios provocados por el macrismo y la gestión de Massa (quien acaba de ejecutar una devaluación del 20% a pedido del FMI), cuyas razones debemos buscarlas en la escasez de reservas producto de la fuga de divisas constante a manos de los capitalistas, la cual prospera al amparo del poder político de turno.
Deslomarse trabajando y aún así no poder llenar la heladera es lo que explica el “voto bronca” contra los partidos tradicionales que canalizó el facho de Milei posando de antisistema. Juntos por el Cambio y el peronismo son responsables de que ascienda esta variante reaccionaria porque frustraron las aspiraciones del pueblo cuando les tocó gobernar. Todo, por cuidarle el bolsillo a los dueños del poder.
En este cuadro, la tarea de la izquierda es desnudar ante los ojos de la población que el candidato de La Libertad Avanza abreva en los mismos intereses que nos condujeron a la debacle actual. Quienes vivimos de nuestro trabajo no podemos depositar expectativas en una figura que predica a favor de eliminar los derechos laborales y dolarizar la economía, cuando esto implica una megadevaluación que licuará aún más los salarios. Para recomponer el bolsillo popular no hay atajos, requiere organizarse de manera independiente a todos los políticos capitalistas.