Sociedad

13/9/2022

Córdoba: expolicía afirma que lo exoneraron por denunciar corrupción

Queda al descubierto, nuevamente, la corruptibilidad y la mafia del las fuerzas de (in)seguridad. 

Imagen extraída de Policía de Córdoba.

Juan Carlos Campoy, expolicía, denunció una serie de irregularidades que llevaron a su exoneración. Él formó parte de la policía entre los años 2017 y 2019. En una entrevista realizada por Bambacoop, contó que mientras se encontraba en la fuerza él se negó a participar de actividades ilegales y esto le trajo consecuencias. Además, hasta el momento, no le han pagado parte de su sueldo y su aguinaldo completo de los dos años que ejerció.

En primer lugar, Campoy acusa a Pablo Orellano, el comisario que estaba a su cargo. Afirma que este hombre quería obligarlo a robar combustible de los móviles policiales para uso personal y también para su pareja. Cabe destacar que la pareja del comisario es Karina Ludueña, quien actualmente se desempeña como cabo primera. De la misma manera, le decía que robe herramientas y repuestos. El expolicía asegura que él siempre se negaba.

El comisario, entonces, comenzaría a tomar represalias contra Campoy. Le quitaba los francos y lo obligaba a cubrir sus turnos y los de Ludueña. Además, los malos tratos y humillaciones se hicieron frecuentes. Llegó un punto en el que Juan Carlos no aguantó más la situación y decidió denunciar todo ante el Tribunal de Conducta Policial.

Ana María Becerra era quien estaba en ese momento a cargo del tribunal. No solo nunca investigó la denuncia, sino que inmediatamente le avisó al comisario Orellano lo que estaba sucediendo. Luego de eso, a Campoy lo mandan a hacer tareas operativas y le realizan un informe desfavorable. Estas acciones le arruinaron su carrera como policía. Además, durante el tiempo que siguió trabajando, nunca dejó de estar subordinado al comisario que había denunciado.

Ya completamente apartado de su cargo, Campoy se dedicó a reunir pruebas que demuestren que su exoneración fue una venganza por denunciar a Orellano. Él asegura que diferentes oficiales jefes de la policía firmaron su informe desfavorable sin conocerlo ni tener idea de su caso. Además, denuncia también que actualmente la policía lo persigue y lo para en todos lados. Lo amenazan y lo acusan de “traidor”.

Una vez más, quedan al descubierto las redes de corrupción dentro de la policía. Y también como de forma mafiosa persiguen y amedrentan a quienes se niegan a formar parte. Hasta el día de hoy, nunca se investigó ni se condenó a nadie por este caso en el que estuvieron involucrados altos rangos de la policía de Córdoba.

Y este no es un caso aislado, es un accionar sistemático. La misma policía que se ve envuelta en estos escándalos es la que luego criminaliza y detiene a lxs jóvenes de los barrios más populares. Por esto, exigimos el desmantelamiento de las fuerzas represivas del Estado, así como también la elección de jueces y fiscales por medio de voto popular, esto como parte de un programa de transformación social sobre nuevas bases.