Dentro de los más de 300 ítems presentados en el DNU de Javier Milei, y algunos de ellos anticipados por cadena nacional, la noche del martes 20 de diciembre, se incluye un fuerte cambio en el negocio del turismo. Los artículos 348, 349 y 350 del decretazo derogan parte de la ley correspondientes al sector. La ley 18.828 que reglamenta la hotelería, la 18.829 que controla los agentes de viajes y la 26.356 que interviene sobre sistema turístico de tiempo compartido. Como fundamentos, el Ejecutivo nacional esgrime que buscan “incrementar la oferta de desarrollos turísticos, quedando la actividad plenamente desregulada”. Una mano importante para los fraudulentos.

Las agencias de turismo no deberán estar registradas en ningún ente, desligando al Estado de todo control, tanto de la seguridad física de los pasajeros como financiera, dando vía libre a las estafas, muchas ya existentes. Tampoco se efectuarán análisis y seguimiento de antecedentes penales de sus coordinadores. Muy a tomar en cuenta, especialmente en los viajes de estudiantiles de fin de curso (egresados).

Entrevistado por el canal Todo Noticias (TN), Federico Sturzenegger, siguiendo la tónica de que el Estado debe dejar de meterse y justificando el decretazo ajustador, expresó que “parte de la vida es la libertad de elegir. Y confiar en la adultez de las personas para elegir y designar sus vidas”. Salto al vacío y sin red.

Cualquier persona que quiera ofrecer paquetes turísticos y montarse un kiosquito trucho (o real sin seguro) lo puede hacerlo. Se trata de una resolución que hace retrotraer la situación a los 90 menemistas, donde importantes cadenas de turismo estudiantil (Zaiga, Travel, El Rápido Argentino y Lapa) engañaron a centenares de egresados, dejándolos “a pata”, llevándose los depósitos efectuados para el viaje. Fraudes que hasta el día de la fecha se siguen verificando a nivel nacional.

El nuevo Ejecutivo nacional elimina el Fondo de Fideicomiso de Turismo Estudiantil, creado para responder ante casos de fraude por parte de las compañías. Fondo sobre el Sistema Cuota Cero que funciona como un seguro ante inconvenientes surgidos por la agencia para cumplir el contrato. Derogando el Registro de Agencias, resulta, no tiene sentido el Certificado de Turismo Estudiantil y, por ende, también el Fondo de Fideicomiso.

Por otro lado, las denuncias por maltrato y violaciones a menores de edad por parte organizadores de excursiones de fin de cursada secundaria se multiplican. Como ejemplo sirve el caso de una alumna de un colegio secundario de Cutral Co, quien denunció que uno de los coordinadores abuso de ella en el viaje a Las Grutas, en los primeros días del este mes de diciembre.

El nuevo decreto de Milei va de la mano de la inflación y la fenomenal devaluación (por encima del 50% en el mes de diciembre), que vienen destrozando los bolsillos de las familias trabajadoras, licuando sus ingresos, impactaron de forma directa en los viajes de fin de curso, transformándolos (desde hace tiempo) en algo inaccesible. Ya para mayo el costo superaba los $400 mil la semana en Bariloche.

El decreto de Milei coloca a las familias trabajadoras en un mayor lugar de vulnerabilidad ante los negocios turísticos, sin ofrecer ninguna garantía o recurso para cubrirse ante eventuales defraudaciones. Hay que derrotar esta ofensiva para defender el derecho al esparcimiento accesible a la población trabajadora.

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