Sociedad

6/9/2012|1238

El Polo Audiovisual

Un polo patronal de negociados  y de guerra por los medios

La semana pasada, CFK reunió en el museo del Bicentenario a la habitual claqué kirchnerista del campo cultural y a los bloques patronales con intereses en la ‘desinversión’ el grupo Clarín. Estaban empresarios de multimedios afines, productores de contenidos negreros y un pulpo inmobiliario-sojero. El plan ‘audiovisual’ incluye hasta la compra del pase de Tinelli.


Los anunciados decretos de promoción de la industria audiovisual elevan el monto de los subsidios de 3,5 a 5,5 millones de pesos y declaran “actividad industrial” a la producción audiovisual. El primero es un ajuste por inflación. El segundo, satisface un reclamo histórico de las patronales: no pagar impuestos. Los aplausos por parte de las grandes productoras (Ortega, Portal, Villarroel) -asociadas a los grandes multimedios (Vila-Manzano, Haddad, López)- fueron seguidos de la euforia por el megaproyecto inmobiliario del Polo Audiovisual en la Isla Demarchi. Es que se trata de un regalo para el pulpo inmobiliario y sojero Irsa-Cresud, de Elsztain, que posee las 72 hectáreas de la ex Ciudad Deportiva de Boca, linderas a la isla. Allí planea construir la Dubai de Costanera Sur, “Santa María del Plata”. La ‘puesta en valor’ de la Isla Demarchi es funcional a la recontra puesta en valor de ese proyecto inmobiliario.


Macri-Clarín


A su vez, el proyecto de creación del Polo Audiovisual en el territorio de la Capital constituye un nuevo choque contra Macri, que ya inauguró su propio Polo en la comuna 14. Macri, sin embargo, debería aportarle sus votos en la Legislatura para la aprobación del proyecto de la Isla Demarchi. CFK ofrece a los capitalistas un negociado más grande que el que puso en marcha Macri. Ahora vamos a la disyuntiva de siempre en un negociado entre capitalistas: guerra o reparto (desigual) de la torta.


Plan de “contenidos”


La presencia en la platea de Fabián Scoltore, número dos de Ideas del Sur, así como la de Antonio Gasalla (invocado recientemente por Moreno en la asamblea de Papel Prensa), aumentan la presión sobre el objetivo estratégico del kirchnerismo: Tinelli. Según Perfil (3/9), Vila, Manzano y Abal Medina se reunieron con el flamante vice de San Lorenzo para negociar su pase a los medios K. Ni los laderos de Magnetto lo desmienten. Esta asociación promete a Argentina ‘culos para todos’.


A estos “novedosos” contenidos de los “nuevos” medios, se suman las nuevas condiciones para acceder al Plan de Contenidos. Hasta el año pasado, cualquier realizador independiente podía concursar por subsidios para la producción de obras, sólo debía tolerar la presencia de un tutor designado por el INCAA. Ahora, el cincuenta por ciento de ese presupuesto será directamente asignado a la industria y la otra mitad quedará condicionada a una asociación previa con la producción K de Encuentro, Paka Paka o Canal 7. De los famosos tres 33% entre privados, estatales y sin fines de lucro, pasamos al fifty fifty entre capitalistas y cristinistas.


Hollywood K


Varios medios se empecinan en denominar así al proyecto de Isla Demarchi, como si esto significara el ascenso imparable de la audivisión nacional. Pero en verdad, no disputa a la Hollywood de California ni una migaja de la posición dominante norteamericana en las salas y la TV. No aumenta la cuota de pantalla, no crea nuevas salas a precios populares ni condiciones favorables para el lanzamiento de las películas nacionales de bajo presupuesto, nada de nada.


La guerra estatal-capitalista en los medios no beneficia en nada a los trabajadores ni eleva la calidad de vida del pueblo. Abajo el monopolio capitalista de la producción cultural, por la gestión colectiva del arte, la cultura y el espectáculo por parte de sus productores reales.