Trabajadores desocupados organizados en el Polo Obrero se manifestaron este miércoles 10 en el Obelisco porteño para denunciar la crisis habitacional y el impacto del desempleo y la pobreza en las dificultades para pagar los alquileres.

Desde la convocatoria señalan que el gobierno ya ha anunciado que no extenderá el plazo de la prohibición de desalojos y que a su vez dará rienda libre a la liberaciones de los precios de los alquileres, lo que pone al orden del día miles de desalojos y la imposibilidad, para una familia obrera, de costear el alquiler de una vivienda.

Se trata de varios inquilinos movilizados ante el agravamiento de sus condiciones de vida y frente a la previsibilidad de dificultades para poder mantenerse en sus hogares.

Los anuncios del gobierno no han sido acompañados por ninguna política habitacional, en el marco de una profunda crisis respecto a este derecho insatisfecho. Recordemos que el 2020 fue un año marcado por un auge de los procesos de recuperación de tierras, protagonizados por familias sin techo, desplazadas de sus viviendas ante la falta de pago por la crisis.

Desde el Polo Obrero plantean la suspensión efectiva de todos los desalojos; plan de viviendas real, con planificación y control de vecinos y organizaciones; plan de desendeudamiento sin intereses y subsidio habitacional nacional irrestricto.