El lunes 13 de julio, los vecinos del barrio La Chechela de Escobar realizaron un piquete frente a la planta de Aysa, ya que hace más de una semana están sin agua corriente. La planta, ubicada en el corazón del barrio, somete permanentemente a los vecinos a cortes del suministro sin aviso previo y sin informar cuando se restablece el servicio. Se trata de una constante en todo el partido de Escobar, a lo que se suman los regulares cortes de luz. La Municipalidad se limitó a enviar unos pocos “camiones regadores” para paliar la grave situación, ante los reclamos de los vecinos.

Aysa, ahora presidida por Malena Galmarini (esposa de Sergio Massa), brinda un pésimo servicio por no realizar las obras de mejoramiento y extensión de la red de agua potable. Hace ya cuatro años del traspaso del servicio de Absa (la empresa provincial) hacia Aysa en el distrito, cuando con bombos y platillos el intendente Ariel Sujarchuk y el entonces ministro de Interior del macrismo, Rogelio Frigerio, anunciarion el compromiso de que “en 2023 todos los hogares de las cinco localidades contarán con los servicios de agua potable y cloacas”. En realidad, la actual situación revela que ni Aysa ni el municipio pueden siquiera garantizar agua potable a los que ya cuentan con el servicio.

Según el informe elaborado por el programa “Sed Cero” (que agrupa a organismos públicos, organizaciones civiles, investigadores y empresas) Escobar ocupa el tercer puesto entres los 135 distritos de la provincia de Buenos Aires con peor acceso a la red de agua y cloacas. El 77% de la población no tiene acceso a la red de agua y el 82% carece de cloacas. Una verdadera catástrofe en materia de acceso a servicios esenciales, especialmente ante las necesidades de higiene que impone la crisis sanitaria causada por la pandemia.

Esta realidad muestra que, contra la insistencia permanente del gobierno sobre las responsabilidades “individuales” ante el crecimiento exponencial de casos de Covid-19, son el Estado y los gobiernos quienes someten a la población a condiciones de vida paupérrimas, el terreno fértil para la propagación del virus y de otras enfermedades como el dengue.

Reclamamos la inmediata restitución del servicio de agua en el barrio de La Chechela. Por un plan de obras públicas integral (red de agua potable, cloacas y gas natural) financiado por impuestos extraordinarios al gran capital y countries de la región para satisfacer las demandas del pueblo trabajador.

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