En la jornada de ayer, más de 80 personas se hicieron presente en el centro de la ciudad al acto por el día mundial para la prevención de los abusos sexuales en las infancias y adolescencia. Como una actividad resuelta a nivel provincial, el plenario de trabajadoras junto al polo obrero, juntas y a la izquierda, ADCO (activismo diverso) y ADOSAC llevó a cabo un acto en el marco de un profundo aumento de casos de ASI e impunidad judicial.

Santa Cruz cuenta con los emblemáticos casos  del concejal del Frente de Todos, Emilio Maldonado en la ciudad capital; del contador del actual intendente de Caleta Olivia, Claudio Pagano y del concejal Rubén Martínez de Cambiemos de la misma localidad, los tres, denunciados por abuso sexual infantil.

Es así que en el norte de la provincia, pese a la situación de pandemia, se concentró un gran número de personas en donde la denuncia central apuntó al escrache de los abusadores y a dejar en claro que la responsabilidad de la revictimización de las víctimas, es de la justicia y el estado.

Es la impunidad del poder político, el encubrimiento de las iglesias y la complicidad de la justicia con estos elementos lo que empuja a decenas de personas a pronunciarse en las calles y a organizarse para hacerle frente una situación que se agravo con la cuarentena, llevando así consignas  por una ESI laica y científica, por la separación de las iglesias del Estado y por el aborto legal seguro y gratuito ya.

¿Qué tiene que ver el FMI con los casos de ASI?

Los acuerdos que Fernández lleva adelante con los bonistas y el FMI implican un fuerte ajuste al conjunto de la clase obrera.

La falta de inversión en educación imposibilita a que se destine el financiamiento para que la ESI sea efectivamente aplicada como una herramienta fundamental de prevención y detección de abusos. Por otro lado, el aislamiento obligó a miles de niñes a permanecer 24/7 con sus violentos y abusadores ante la creciente desocupación.

A esto hay que sumarle la importancia de que se apliquen las ILE y que el aborto sea legal seguro y gratuito, ya que bajo la consigna “niñas no madre” denunciamos como las iglesias, en consonancia con los sectores más reaccionarios, han obligado a niñas víctimas de violaciones a llevar a términos sus embarazos, sometiéndolas a una tortura por parte del estado y a una maternidad forzada. Y esto no es más que el resultado de la receta fondomonetarista que sigue desfinanciando el sistema de salud y refuerza la intervención clerical para contener mediante la caridad la creciente miseria.

Llamamos a seguir organizades, de manera independiente de los partidos patronales que mantienen abusadores en sus filas, mientras hacen demagogia con la perspectiva de género, y a seguir reclamando por romper la impunidad de los abusadores, por presupuesto para educación sexual integral laica y científica, para que ya no hayan niñas obligadas a parir, por la separación de las iglesias del estado y por el aborto legal seguro y gratuito ya.