Sociedad

3/11/2016

Guns N’ Barras: cambian el horario de River-Estudiantes para beneficiar a los Borrachos del Tablón

El partido iba a jugar a las 20, pero la AFA decidió adelantarlo para las 16 a pedido de la barrabrava millonaria.


River debe recibir al puntero del torneo, Estudiantes de La Plata, el día sábado en la cancha de Huracán, ya que el Monumental será testigo del segundo y último show de Axl, Slash y compañía en Buenos Aires. Hasta ahí, nada fuera de lo normal, la mayoría de las comisiones directivas optan por alquilar sus estadios, relegando las cuestiones deportivas y comodidad de sus socios e hinchas a un segundo o tercer plano, priorizando lo económico.


Sin embargo hubo un cambio de último momento en la programación de dicho encuentro. Desde la AFA anunciaron que el partido se jugará a las 16hs y no a las 20, como se había estipulado hace ya unos días, contra la voluntad de la televisión, que pretendía darle un horario central a uno de los partidos más importantes de la fecha.


El periodista Gustavo Grabia denunció que el cambio de horario lo pidió la barra de River, para poder llegar a tiempo antes del comienzo del recital de Guns N’ Roses en el Monumental, y así participar de los negocios que tienen en el show.


El empresario Daniel Grinbank, productor de muchos de los shows internacionales en nuestro país, ya había avisado que no hace más recitales en River porque “los barras son dueños y señores de los estadios” (Télam, 6/3). Las presentaciones de los Guns N’ Roses en Argentina no son la excepción.


Resulta que “Los Borrachos del Tablón” cuentan con más de 3 mil entradas para la reventa, dos molinetes liberados, además del ya conocido –y denunciado por el Legislador del PO-FIT en CABA, Marcelo Ramal– negocio de los “trapitos” en la zona del estadio. Para poder llevar a cabo todas estas actividades la barra millonaria debe estar presente desde unas horas antes de que comience el recital, por ende se hacía incompatible con el partido a las 20 horas.


Todos estos negocios de las barras bravas no pueden ser llevados a cabo sin la complicidad del Estado, partícipe necesario en el armado de los mismos. Desde los organismos de seguridad y la policía que hacen la “vista gorda”, los dirigentes de los clubes, los productores de los shows y los políticos de los partidos patronales y burócratas sindicales que luego utilizan a estos grupos como fuerza de choque contra los trabajadores. Es necesaria la organización de los socios e hinchas para echar a estas lacras de las canchas, que lucran con los clubes, robándoles, y además no les permiten a los trabajadores poder disfrutar un domingo en paz con sus familias en los estadios.