En las últimas horas de la jornada de ayer más de 8 mil vecinos a pie y en caravana, se convocaron a través de las redes sociales, al pie del monumento al obrero petrolero para exigir de una vez por todas, que el gobierno del intendente Fernando Cotillo y la gobernadora Alicia Kirchner (FDT) de respuesta a una problemática que afecta a la ciudad hace por lo menos 35 años.

Los ciudadanos ya cansados de la descarada corrupción del gobierno que estuvo a cargo de la provincia los últimos 35 años y la complicidad del radicalismo en la localidad, convocaron a una marcha para denunciar la ausencia de agua en algunos sectores de la ciudad, desde hace por lo menos 25 días, sin contar con que hay sectores que solo dependen de la distribución de agua por camiones y que no están siendo garantizados.

Como se sabe, no es una noticia que sorprende ya que han sido innumerables las veces que el gobierno local anunció negociados con empresas privadas para solucionarlo, al igual que inversiones en acueducto e inclusive, después de décadas, se instaló finalmente una planta de Ósmosis que a las pocas semanas de haber sido inaugurada, ya presentó rotura de caño y quedo totalmente inutilizada. Además desde Chubut, desde donde se provee agua a la localidad, ya han expuesto las deudas que la empresa tiene, la cual condiciona la distribución normal del servicio. Una vez mas, los medios locales replicaron noticias, desde SPSE en donde declaran que se están haciendo negociaciones con empresas privadas para dar solución al problemas de la falta de agua, sin embargo los vecinos ya advierten que esto se puede tratar de una movida fraudulenta del intendente para beneficio personal y de sus amigos empresarios.

Cabe mencionar que no es una situación habitual, ya que estamos atravesando una pandemia que exige una rigurosa desinfección e higiene, por lo tanto es criminal hacer la vista gorda al reclamo desesperado de aquellos quienes tienen familiares en situación de pacientes de riesgo puesto que el acceso al servicio es cada vez mas difícil, ya que ni los cargaderos ni los camiones tienen el suficiente agua para abastecer a todos aquellos que esperan hace semanas y que de poder hacerlo, no todos puede acceder ya que un camión cuesta aproximadamente $500 y para un desocupado, costearlo es francamente imposible.

Una vez finalizada la enorme movilización en asamblea se decidió que se va a esperar que en el día de la fecha que el intendente y el vice gobernador Eugenio Quiroga, se presenten en la localidad para dar soluciones y de no ser así, o volver a ser la misma respuesta de siempre, se votó ir el día miércoles 6 de enero al acceso norte de la ciudad y cortar la ruta nacional 3 con un piquete indeterminado hasta que haya respuestas efectivas.