Sociedad

10/11/2020

FAMILIAS SIN TIERRA

Inauguramos el comedor “Por el derecho a la tierra” en Guernica

Se profundiza la organización de los vecinos y vecinas.

Este lunes 9 de noviembre inauguramos el comedor “Por el derecho a la tierra” en el barrio San Martín, en la localidad peronense de Guernica, a pocos metros del enorme predio donde durante tres meses permanecieron miles de familias que reclamaban respuestas sobre su derecho a una vivienda digna, contra el gobierno de Blanca Cantero, Axel Kicillof y Alberto Fernández, que jugaron -y juegan- para el lado de los negociados inmobiliarios.

Luego de tres meses de ignorar las propuestas de las familias y de las organizaciones que acompañamos la lucha, el gobierno levantó la mesa de negociación, básicamente porque fracasó su política de extorsión e intentos de división. Fue así que terminó desplegando 4.000 policías para poder vencer la resistencia de estas familias trabajadoras. Sin embargo, la lucha en Guernica sigue, y este comedor es una de las demostraciones de ello.

La organización independiente de las y los trabajadores, el gran problema del gobierno

Casi al mismo tiempo que Berni y su ejército disparaban gases y balas de goma sobre personas indefensas y prendían fuego casillas, funcionarios como Larroque, y el propio Kicillof, se felicitaban así mismos por lo actuado, a la vez que pretendían responsabilizar a la izquierda y a vecinas y vecinos “radicalizados” del fracaso de su política y la represión. Efectivamente, las organizaciones que acompañamos a las familias de Guernica fuimos virulentamente atacadas por el gobierno y sus acólitos, en particular el Polo Obrero.

Lo que ocurre es que lo de Guernica marcó un punto de inflexión en la relación entre las masas y el gobierno pejotista: Guernica fue del enterramiento del supuesto progresismo del gobierno. Para explicar y justificar no solo el violento desalojo de familias sin nada, sino también la elección de privilegiar los intereses de empresarios que buscan construir en esos terrenos un countrie, se les ocurrió la gran idea de “macartear” a la izquierda. Sin embargo, la masiva movilización del viernes 30, de repudio a la represión, y la continuidad de la organización independiente de los vecinos y vecinas de Guernica es un fuerte golpe a esta política.

Las familias del predio de Guernica se siguen reuniendo en asambleas que se organizan en comisiones, votan movilizaciones y la continuidad del plan de lucha por tierra y vivienda; pero también continúan construyendo espacios comunes, como el comedor “Por el derecho a la tierra”. Este comedor no solo tiene por objetivo ayudar a resolver la tremenda necesidad de alimento de cientos de vecinos y vecinas y sus hijos e hijas, sino que también se propine ser un centro de organización del barrio. Porque las demandas que empujaron a miles de familias a tratar de recuperar el predio de Guernica siguen pendientes.

La inauguración

La inauguración contó con la presencia de decenas de vecinos y vecinas del barrio, muchos de los cuales fueron parte de la recuperación, pero también con otros y otras tantas que fueron quienes les daban agua y luz a quienes estaban en el predio o quienes resguardaron a quienes huían de las balas, las motos policiales y los gases en el desalojo del jueves 29 de octubre. Es decir, una gran muestra de la continuidad de los lazos de solidaridad obrera que el gobierno pretendió romper y no pudo.

Estuvo invitado especialmente Eduardo Chiquito Belliboni, quien jugó un rol importante en esta lucha. Invitó a los presentes al acto que el Partido Obrero realizará este sábado 14 de noviembre en Plaza de Mayo, para poner en pie una alternativa propia de las y los trabajadores frente al régimen de saqueo y hambre que este gobierno ajustador quiere imponer. Tenemos, así, el compromiso de asistencia de decenas de vecinos y vecinas este sábado, donde el reclamo de tierra y vivienda estará fuertemente destacado.

Otro de los asistentes a la inauguración fue Milo Tomás, el bebé que nació el 23 de septiembre en la recuperación en la casilla donde estaba viviendo su familia desde principios de la ocupación. Hoy Milo, sus dos hermanitos y su mamá están alojados en la casa de una compañera del Polo Obrero, debido a que se quedaron sin nada tras el desalojo.

Frente a la falta absoluta de respuesta del gobierno de Cantero y Axel Kicillof y a esta situación, que es la de muchas mujeres solas con sus hijos e hijas, y la de muchos otros vecinos, este miércoles 11 marchamos al municipio de Presidente Perón desde las 10 h. La situación en la que Milo nació y atraviesa sus primeros meses de vida es la prueba fehaciente de las acciones de un Estado ajustador que desaloja y reprime pobres, en defensa de un negocio. Pero también es la prueba de que seguimos de pie y no nos han derrotado. Desde el Polo Obrero y todas las familias que siguen en la lucha vamos a seguir peleando por el derecho a una vivienda digna para Milo, su familia y todas las familias trabajadoras de Guernica.