En declaraciones al diario Río Negro (2/7), el secretario de Acción Social de la municipalidad, Diego Cayol, afirmó que el intendente no vetará la ordenanza de garrafa, proyecto presentado por nuestro compañero César Parra y que fuera votado el pasado 16 de junio por el Concejo Deliberante de Neuquén capital. Por esta iniciativa, que concentra un gran reclamo popular, obliga al municipio a la adquisición de 2.000 envases por año y más camiones garroferos.

Las declaraciones del funcionario confirmando que no anularán la ordenanza ponen de manifiesto que la conquista de la misma fue el resultado de una movilización popular y una campaña política que condensa la principal contradicción social de la provincia. Sucede que por un lado expone a una provincia que concentra un régimen de saqueo por los pulpos petroleros y a un Estado actuando como agente de estos intereses, y por el otro, y miles de familias sin gas.

Despejado el aspecto de que la ordenanza no será vetada se abre una lucha por su aplicación efectiva. El gobierno debe celebrar un convenio con YPF, que es el principal oferente de envases, y debe poner en circulación más camiones garrafero para su distribución. Para eso, vamos a seguir desarrollando esta lucha, ya que la orientación del gobierno no es aplicarla, sino dejarla morir o que no tenga curso en este año. Seguro pondrán trabas burocráticas y pretenderán demorarla. Por ello, el pasado miércoles 29 nos movilizamos a las puertas del municipio, tomando amplia repercusión nuestra acción.

Una vez más, la clave es continuar la lucha por su aplicación efectiva. Vamos por ello.