Sociedad

8/6/2021

Socialismo o Barbarie

Una tragedia anunciada: dos familias mueren en el incendio de una casilla en Ensenada

Este fin de semana, dos familias murieron carbonizadas en el barrio Piria de la localidad de Punta Lara (Ensenada). Las siete víctimas fatales -dos madres jóvenes y sus hijos pequeños- perdieron la vida en el incendio devastador que consumió en poco tiempo la vivienda. Según el informe preliminar de los peritos, el siniestro se habría originado en las condiciones deficitarias de la instalación eléctrica, y se propagó de inmediato por la construcción precaria de madera.

Suteba Ensenada, el combativo sindicato docente, sacó un comunicado denunciando la responsabilidad del Estado nacional, provincial y la intendencia kirchnerista en este crimen social. Mario Secco, jefe comunal de Ensenada, lamentó el accidente fatal, pero quienes hablan de “fatalidad” encubren las condiciones de hacinamiento, miseria, falta de viviendas y déficit habitacional que golpean a millones de bonaerenses. La tragedia de Punta Lara retrata al régimen social que deja a millones sin trabajo, sin vacunas y sin techo.

En Prensa Obrera denunciamos la proliferación de asentamientos y villas en el Gran La Plata, incluyendo los municipios de Ensenada y de Berisso. “Barrios Populares” sin servicios básicos y radicados en zonas inundables. El Gran La Plata es conocido, desde hace tiempo, como la “capital provincial de las villas” por los 152 asentamientos precarios platenses, los 18 de Berisso y 17 de Ensenada. Uno de estos barrios, José Luis Cabezas, colindante entre Ensenada y La Plata, fue duramente castigado por el brote de contagios en la primera ola y cercado en el 2020 por la Bonaerense de Sergio Berni al comienzo de la pandemia.

El listado de asentamientos y villas no incluye la enorme ocupación en la zona del ex Club de Planeadores, la recuperación de tierras más grande de la provincia de Buenos Aires, en cuyo desalojo están empeñados tanto el intendente macrista, Julio Garro,como el gobernador del Frente de Todos, Axel Kicillof. Con el mismo cinismo que en Guernica, dicen estar preocupados por una “solución pacífica”, señal de que se prepara la represión a los ocupantes. Cuando mueren trabajadores como ocurrió en Punta Lara, la burguesía habla de “accidentes”, cuando la clase obrera lucha y se organiza por la tierra y la vivienda, los tildan de usurpadores y delincuentes.

Las viviendas precarias de Piria son un escenario repetido en toda la región. Según un informe del Observatorio Socioeconómico de la Universidad Católica de La Plata los “barrios populares” crecen a mayor velocidad en La Plata, Ensenada y Berisso, que en otros lugares de la Argentina. Son 260 los asentamientos y villas en los tres municipios, y más de 200.000 personas, que viven en estas condiciones críticas, con servicios menguados o sin servicios. La pandemia pega fuerte en la periferia donde uno de cada dos testeados dio positivo por coronavirus. No se puede entender lo ocurrido en Punta Lara al margen de este panorama desolador en una provincia que tiene un déficit de viviendas superior al millón de unidades, y donde el derecho al techo está vedado por los salarios de hambre, la desocupación masiva; los alquileres exorbitantes y los créditos impagables de usura.

En el mes de mayo, Alberto Fernández, Cristina Kirchner, Axel Kicillof , Sergio Massa y el intendente Mario Secco se sacaron la foto de “unidad” del peronismo, anunciando en Ensenada el Programa Reconstruir para terminación de viviendas interrumpidas desde el 2008. Las viviendas pendientes se remontan a trece años atrás y quedaron sin terminar por la subejecución de las partidas presupuestarias para cumplir con el pago de la deuda externa bonaerense y los subsidios a las patronales. Este “plan nacional” debería finalizar las viviendas en el Barrio Federal 2 de Ensenada, y los módulos en el predio Piria de Punta Lara. Nada de esto se hizo, pese a la fanfarria de albertistas y kirchneristas. Fue justamente en Piria, una de las prioridades del “plan”, donde el incendio consumió la casilla precaria, enteramente de madera, que terminó con la vida de siete personas.

El contraste entre el relato de campaña electoral del gobierno de Frente de Todos y la realidad de los sin techo es abrumador. Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda Unidad denunciamos la responsabilidad política de todos los gobiernos al servicio del capital y la especulación inmobiliaria. El Presupuesto Nacional y Provincial 2021 de ajuste, las paritarias con techos de hambre y el brutal ajuste fiscal como garantía de pago de la deuda son incompatibles con un plan de viviendas y urbanización para dar una salida a los cientos de miles que viven en asentamientos y villas.

¡Justicia por Camila, Thiago, Eneas, Sandro, Ramón, Elena y Evelín!