Esta semana hubo 24 horas de paro de las trabajadoras municipales de la Subsecretaría de Niñez del distrito bonaerense de Moreno (servicios locales). El paro fue votado por una asamblea de trabajadoras y apoyado por la comisión directiva de ATE y la junta interna de Municipales.

La medida de fuerza se concretó por el hartazgo de las trabajadoras. Reclaman que se termine con la precarización laboral; que los salarios están por debajo de la canasta básica; que les recortan los salarios y hay mucha sobrecarga laboral; condiciones edilicias seguras para desarrollar su actividad; rechazan la desarticulación de los equipos y, como si esto fuera poco, denuncian que desde los supervisores y jefes las persiguen, hostigan y maltratan.

El maltrato y la persecución por parte de las autoridades de Niñez surge como reacción a la organización de las trabajadoras. Ante las asambleas, las denuncias públicas y las medidas de fuerza, las autoridades (directora Ana Claudia Almeida y subsecretaria María Patricio) les responden “que renuncien”, “que se vayan”.

El sector Niñez de la Municipalidad funciona con trabajadores sociales, asistentes sociales, abogadas, psicólogas (un equipo profesional interdisciplinario), de la problemática de las niñeces de los barrios de Moreno. Las profesionales se encargan de resolver problemas de vulneración de las infancias en la territorialidad de los barrios profundos de Moreno. La “desarticulación” de los equipos implica cambiar a los profesionales de los territorios donde ya trabajan hace años, colocando a nuevos profesionales y revictimizando a las familias (porque tienen que empezar de cero).

Las trabajadoras denuncian la precarización porque exceden las 8 horas de trabajo por falta de personal. Además, los pases a planta transitoria o permanente son exiguos, lo que abunda es la contratación bajo el marco del monotributo. Esto es un fraude laboral, porque las trabajadoras son empleadas en relación de dependencia del Municipio de Moreno.

ATE denuncia que la “mesa de diálogo” que se abrió el año pasado, arrancada por la organización y las medidas de fuerza de las trabajadoras, no resolvió nada y no hubo nueva convocatoria.

Según Unicef “dos de cada tres niñas y niños de Argentina (66%) son pobres por ingresos o están privados de derechos básicos, como el acceso a la educación, la protección social, a una vivienda o un baño adecuado, al agua o a un hábitat seguro”. En Moreno, uno de los distritos más pobres del Conurbano, estos datos son reflejo de la realidad. Claramente, no es prioridad para la intendenta Mariel Fernandez atacar la vulneración de derechos de las niñeces del distrito. Es necesario revertir esta situación.

Todo nuestro apoyo a las trabajadoras de Niñez del Municipio de Moreno. Hay que darle continuidad al plan de lucha por todos los reclamos. Basta de persecución y hostigamiento patronal.