Universidad

2/3/2019

Arquitectura UNLP: asamblea de mujeres vota plan de lucha y marchar el 8M

Decenas de estudiantes y también docentes participaron de una asamblea de mujeres y disidencias convocada por la conducción del Centro de Estudiantes de Arquitectura (EnPerspectiva UJS+ AGITE) para organizar el gran paro internacional del 8M y el inicio de una campaña de lucha.


La asamblea se pronunció por la conquista urgente del aborto legal, seguro y gratuito, repudiando las aberraciones cometidas por el Estado y el oscurantismo, exigiendo la inmediata separación de la Iglesia del Estado. 


También se resolvió la creación de una comisión de géneros interclaustro para impulsar la pelea por licencias por maternidad para las compañeras docentes, becas de ayuda económica y de albergue para víctimas de violencia, de manera inmediata, para conquistar y mejorar nuestras condiciones de trabajo y estudio. 


Resolvimos retomar la campaña por los jardines materno-paternales en la Universidad y exigir cambiadores en los baños de hombres y mujeres y la distribución de anticonceptivos. El próximo Consejo Directivo será escenario de la primera batalla por imponer nuestra agenda, al cual iremos movilizadas.


 A raíz de la ola de intentos de secuestro en las zonas aledañas al campus universitario, exigimos la colocación de luminarias para una mayor seguridad a la hora de salir del predio de la facultad y planteamos la necesidad de impulsar acciones callejeras para frenar esta situación. 


Debates


Una de las polémicas que atravesó a la asamblea a partir de la posición de las compañeras de Agite, fue que el paro del 8M debía ser exclusivamente una cuestión de género: un paro “al macho y al patriarcado”, y proponer como alternativa un “taller de deconstrucción” donde sus propios compañeros sean los encargados de llevarlo adelante abandonando el carácter de lucha contra el régimen que tiene desde sus orígenes el Día de la Mujer Trabajadora. 


El planteo de que "nuestros compañeros vayan a cubrir nuestros puestos de trabajo" es la orientación de la burocracia sindical que necesita contener las energías de lucha del movimiento para que no avance una lucha de conjunto que se llevaría puesto al ajuste del gobierno y a la propia burocracia que pacta la aplicación de este ajuste.


La lucha de las mujeres no es una pelea segregacionista; es una causa que debe unir a la clase obrera detrás de la comprensión de que la violencia de género, la ilegalidad del aborto, etc. Son instrumentos del capitalismo para regimentar y controlar a las mujeres y disidencias. Esta orientación, que se impuso en la asamblea, debilita el impacto que podría significar un paro y movilización del conjunto de los/as estudiantes y trabajadorxs al régimen social responsable de la violencia sobre nosotras, en reclamo por nuestras reivindicaciones. 


Frente a una situación social que se agrava cada vez más producto de la aplicación a rajatabla de las políticas de ajuste del FMI por parte del gobierno macrista, que cuenta con la complicidad de la oposición pejotista y kirchnerista, el movimiento de mujeres debe ponerse de pie y retomar la iniciativa que desplegó durante 2018 para derrotar la ofensiva clerical y todas las formas de violencia que el Estado promueve y convalida. 


Con estas resoluciones de la asamblea, la UJS en la conducción del Centro de Estudiantes, se propone poner de pie a todas y todes les estudiantes para pelear por las reivindicaciones de les compañeres y derrotar el ajuste y la violencia de Macri, los gobernadores y el FMI.


¡El 8M todas y todes a las calles!