En forma exprés y de espaldas a lxs estudiantes, el Consejo Directivo de Arquitectura de la UNLP aprobó por unanimidad un proyecto que recorta Arquitectura 6, el último nivel de la materia troncal de la carrera de arquitectura. El proyecto supone pasar los contenidos de arqui 6 a la 5 y “compensar” la carga horaria perdida extendiendo la instancia del Proyecto Final (tesis) de 4 a 6 meses, con inicio en marzo, aprobación en septiembre y defensa en diciembre del año que viene.

Las autoridades radicales de la facultad y su agrupación estudiantil Franja Morada quieren convencer a lxs estudiantes diciendo que apuntan a posibilitar el egreso en 6 años (dado el retraso con un promedio de 8 a 10), pero esto es una completa estafa, ya que el problema del retraso en la realización del proyecto final es la falta de docentes y la no contratación de estos en los dos cuatrimestres, problema que continuará con el nuevo esquema.

A su vez, el PFC ya se desarrolla en seis meses. De agosto a noviembre durante el segundo cuatrimestre, y en caso de no aprobar se sigue en febrero y marzo con una segunda fecha. Es decir que la carga horaria recortada de arqui 6 no está siendo “compensada” en ningún lado. Mucho menos los contenidos de planificación urbana que pretenden incorporar a arqui 5, lo cual es impracticable por su complejidad. Es decir, esto es un recorte liso y llano a nuestra formación profesional, por ende al valor de nuestro título de grado.

El objetivo que persiguen las autoridades y la Franja con este recorte no es promover el egreso de lxs estudiantes, sino evitar nombrar los cargos docentes necesarios para el Proyecto Final de Carrera, y utilizar lxs docentes de arqui 6 para esa tarea. Pretenden, así, amoldar la facultad al presupuesto recortado del gobierno y el FMI.

Párrafo aparte merece la posición de Agite Estudiantil, quien apoyó esto con su voto en el Consejo e incluso salió a promocionarlo como propio. Dan así un paso más en una política de adaptación al régimen universitario, luego de romper el frente opositor a la Franja, allanando su reelección en el centro a principio de año.

Ajuste y privatización

Además de ahorrarse la plata de los cargos docentes, con esto las autoridades avanzan en la reforma antieducativa. Esta implica el acortamiento de las carreras a 5 años, con tres de una formación básica gratuita, y dos de “especializaciones” con formaciones rudimentarias a medida de las necesidades de las empresas, estos últimos factibles de arancelar. Para esto, los contenidos serán medidos en créditos y colocados en un mercado único con las universidades privadas, para ser transados (Sistema de Reconocimiento Académico). Un paso grande en esta orientación ya se dio en el año 2018 con el recorte de actividades reservadas (incumbencias) a más de 20 carreras universitarias.

Con el latiguillo de la “flexibilización” pretenden llevarnos al modelo “chileno” donde las familias sacan créditos y se endeudan con los bancos para poder acceder a la educación superior. Esta reforma es compartida por los gobiernos y las autoridades de todos los colores políticos e intentarán aplicarla al compás de un mayor recorte de presupuesto público para destinar esos fondos al pago de la deuda externa y subsidios al capital en crisis.

Defendamos la educación pública

La universidad pública argentina, única en el mundo, está en el blanco del capital financiero y el gobierno para que se desarrollen en ella nuevos negociados. Por lo tanto, es nuestra tarea defenderla. Es por esto que desde En Perspectiva (UJS + independientes) convocaremos a lxs estudiantes a deliberar en reuniones y asambleas para resolver acciones contra el recorte, por el nombramiento de los cargos docentes necesarios y la oferta del proyecto final en ambos cuatrimestres para promover el egreso. La educación pública no se vende, se defiende.

https://prensaobrera.com/politicas/un-superministro-para-un-gobierno-agotado