La Universidad del Comahue entra al proceso de elección de autoridades. Para el 16 de mayo está prevista la asamblea que elegirá al rector; antes, todas las elecciones de consejeros directivos y decanos. La presentación de las listas de los claustros demuestra que estamos ante una asamblea universitaria copada por las camarillas.

 

El sector encabezado por la actual rectora Ana Pechen presenta tres candidatos a rector, sin contar la posibilidad de reelección de la propia rectora. Del otro lado está Salgado, decano de Derecho y Ciencias Sociales, que votó a la Pechen hace cuatro años pero que ahora se encuentra en la “otra vereda”.

 

Tanto oficialistas como opositores defienden una misma política: todos ellos votaron a favor de la reforma del plan de estudios de Medicina, para reemplazar el examen de ingreso por un año introductorio de cinco materias, que son requisito para continuar con las restantes (si se desaprueba una sola materia de este “año introductorio”, no se puede continuar la carrera).

 

La UBA mostró el camino

 

La UJS ha lanzado una importante movilización por la reforma de los estatutos para cambiar la composición de los órganos de gobierno y la propia Asamblea Universitaria. Para esto se realizan plenarios abiertos por facultad que están discutiendo este planteamiento, junto a una intensa campaña con afiches y declaraciones. Hemos realizado un llamado a la Federación y al gremio docente para que se pronuncien en este sentido, en función de lograr una movilización conjunta que haga saltar la asamblea de las camarillas y abra un canal de movilización independiente al conjunto de los estudiantes y trabajadores. Este planteo comienza a generar un importante debate entre el activismo estudiantil ante un conjunto de agrupaciones que plantea votar al mal menor (el gremio docente, dirigido por el PCR, lanzó una campaña por formar una “oposición a la Pechen” con los mismos sectores que formaron parte de la gestión Rabassa, anterior rector referenciado con la Alianza de De la Rúa).

 

En esta perspectiva ponemos todas nuestras energías. La lucha por la democratización del gobierno universitario pondrá a la UJS como palanca entre ese activismo estudiantil que cosechó la toma de 2004 y la necesidad de una salida independiente de las camarillas.