El 3, 4 y 5 de mayo tuvieron lugar las elecciones a consejeros en la Universidad de Lanús. La izquierda, agrupada en la lista Multicolor (UJS-PO, PTS, Estudiantes Autoconvocados, EPE HLI, Frente Darío Santillán) hizo una destacada elección donde el frente obtuvo -según el escrutinio provisorio- un 26% de los votos, lo que le asegura la entrada al Consejo Superior. El consejero entrante lo hará por la minoría en el Departamento de Desarrollo Productivo, donde el frente obtuvo la votación más alta. El cargo lo ocupará Estudiantes Autoconvocados, seguido de la Unión de Juventudes por el Socialismo.

 

 

La elección

 

La Multicolor tuvo que enfrentarse a la Lista Granate, un frente de todas las agrupaciones de la universidad que responden a la gestión de Ana Jaramillo (Frente para la Victoria – PJ), la cual no ahorró en recursos y maniobras con el objetivo de impedir que la izquierda entrara al Consejo Superior.

 

La universidad fue copada por el aparato de la gestión, las autoridades pasaron una y otra vez por cursos llamando a votar a la Granate, incluyendo el levantamiento de cursadas. Incluso avalaron la presentación irregular de la lista de Sur -fuera de término y con candidatos que no estaban en el padrón- con el objetivo de dividir la votación opositora.

 

La Granate desarrolló una campaña intentando identificar a la universidad con ella misma. Por el contrario, desde la UJS impulsamos una campaña que clarificó ante los estudiantes el rol que juega la gestión en la administración del ajuste en la universidad, que se expresa en el sostenimiento de un cupo de ingreso, la defensa de las concesiones privadas y la escasez de la oferta horaria, entre otras cuestiones, que forman parte de una política que va en la línea del ajuste del macrismo en la educación pública.

 

Pusimos de manifiesto también que por la composición anti democrática del Consejo, la Granate ya tenía asegurada la mayoría, ya que es la única lista que se presentó en los otros claustros, cuya representación está ponderada por encima de la estudiantil. Planteamos por ello la importancia de que haya consejeros estudiantiles independientes para defender a la educación pública.

 

 

La situación en los Departamentos

 

La elección se dio por listas en cada uno de los cuatro departamentos.

 

Destacamos la elección en Desarrollo Productivo (31%) lo que representa un avance respecto de la anterior elección de Consejo, continuando con la tendencia que se expresó en la victoria del frente entre Estudiantes Autoconvocados y la UJS en el centro de estudiantes el cuatrimestre pasado.

 

Las elecciones en Planificación y Políticas Públicas (17%) y en Humanidades y Artes (30%), también representan un progreso de la izquierda en departamentos que se caracterizaban por un fuerte dominio de las agrupaciones de la gestión, lo que sienta buenos precedentes para las elecciones de centro que serán este año.

 

Resta hacer un balance en profundidad del retroceso en Salud Comunitaria (24%) donde la izquierda había logrado ganar la elección en la última elección de consejeros y hasta el cuatrimestre pasado dirigía el centro de estudiantes. Es más necesario que nunca retomar el método de un frente único de lucha por las reivindicaciones más sentidas del departamento.

 

 

Lo que se viene

 

La Multicolor tiene el mandato de actuar como un frente de lucha y organización para poner de pie un movimiento estudiantil independiente. Desde el lugar conquistado en el Consejo Superior, la izquierda tiene el desafío de impulsar ese movimiento, combinando la organización de los reclamos con un debate político  y una profunda crítica a la gestión universitaria y a su política de ajuste.