Universidad

6/12/2021

Fulp: un congreso para apoyar el ajuste del gobierno y el FMI

El próximo 7 de diciembre desde las 14hs se realizará un nuevo Congreso Ordinario de la Federación Universitaria de La Plata.

Luego de dos años de pandemia, la conducción saliente de La Mella–La Cámpora–CEPA/PCR quiere renovar autoridades de la Federación Universitaria de La Plata (Fulp) en base a mandatos vencidos, que datan de las elecciones estudiantiles del 2019. La convocatoria llega en momentos donde las clases, en su mayoría virtuales, terminaron, y sin instancias de debate previas entre les estudiantes acerca de la política que debieran adoptar los Centros y la Fulp. Incluso, violando los plazos fijados por el estatuto de la federación, que estipula una convocatoria pública con 15 días de anticipación, cosa que no sucedió.

El balance de la conducción de la Fulp

Los dos años de pandemia no fueron gratis: sin datos oficiales, sabemos que estamos frente a una deserción récord de miles de estudiantes que quedaron afuera de la universidad por falta de acceso a dispositivos y wifi, además de la sobreexplotación de les docentes que aún tienen el salario congelado. Esta es la realidad que choca directamente con el relato de las agrupaciones del rectorado y de la Fulp, en la que durante este último periodo se “conquistaron derechos”, mientras el albergue, el comedor y el servicio de salud estudiantil se encuentran cerrados; el boleto estudiantil sigue sin cobrarse; además de que los dispositivos y la conectividad que otorgó la UNLP no tienen relación con la cantidad de estudiantes que solicitaron las beca “Tu Pc” y la beca de conectividad (esta última recibida por tan solo 17 estudiantes).

Por otro lado, la pelea por terminar con este ajuste es también la pelea por un regreso en condiciones a las aulas, en la medida que la situación sanitaria lo permita. Al comienzo de la pandemia denunciamos que las facultades no estaban preparadas para esta situación, que se va a agravar con los recortes presupuestarios aplicados estos años. En ese sentido, la propuesta de “Bimodalidad”, que un sector de las autoridades universitarias y algunas agrupaciones estudiantiles (como las que conducen la federación) defienden, es en realidad un intento de maquillar esta situación. En lugar de garantizar las condiciones materiales para el regreso masivo a la presencialidad, se escudan en la posibilidad de sostener las cursadas remotas (incluso a costa de la sobreexplotación y precarización de les docentes), para disimular el ajuste, cuando sólo se destinarán $1.500 millones (el 0,46% del presupuesto total de educación) para la nueva presencialidad.

También la Fulp se mostró completamente postrada y ajena frente a las luchas de la juventud, como con las grandes movilizaciones al Ministerio de Educación, por conectividad y wifi, o en las luchas populares de la provincia de Buenos Aires, como el caso de Facundo Astudillo Castro, y durante la lucha de miles de familias por el derecho a la tierra y la vivienda en Guernica que llevó a una brutal represión. En la región estuvieron completamente ausentes en las movilizaciones contra el código represivo del intendente Julio Garro, a pesar de vociferar contra la derecha.

Lo que se viene… la federación del FMI

Sin lugar a dudas, el congreso de la federación llega en momentos de debates políticos importantes en el país. Luego de la derrota electoral del gobierno, en lo que fue la peor elección del peronismo en su historia y a días de un nuevo acuerdo colonial con el FMI, la grieta en la universidad se resume en dos campos: quienes apoyan el acuerdo entreguista que va a someter al país durante los próximos años y quienes enfrentamos en las calles el hambre, el ajuste y la deserción en los lugares de estudio.

Seamos claros, no existe “pagar al FMI” sin “el hambre del pueblo”. Lo que exige el Fondo es profundizar el deterioro de las condiciones de vida con una reforma laboral contra lxs trabajadorxs, recortes en las jubilaciones, despidos baratos, ajuste presupuestario, etc. Un paquete que agravará aún más la situación de hambre y miseria que atravesamos, con más del 40% de pobreza en el país. Todo lo cual no impedirá que el país vaya a nuevas cesaciones de pago y crisis de deuda en una decadencia sin fin.

La educación y la universidad no son ajenas a esta situación. Sin ir más lejos, el presupuesto educativo para el 2022 estipula un aumento del 26,5%, cuando el mismo proyecto estima que la inflación será del 33%. Tampoco se da cuenta de los fondos perdidos por la universidad pública en los últimos años, donde los presupuestos siempre perdieron con la inflación.

Asamblea universitaria: Todos Juntos votan a la derecha de la universidad

El mes de abril vence el plazo para la renovación de mandatos de las autoridades universitarias, y ya hay un pacto entre los radicales y peronistas que cogobiernan la universidad para impulsar la candidatura de López Armengol -el “ala derecha” del rectorado-, que pasará a ser el presidente de la UNLP, haciendo un enroque con Fernando Tabuer, que sera el vice.

Mientras las autoridades garantizaron el ajuste nacional en la UNLP, la Franja Morada y todas las agrupaciones del peronismo (incluida la conducción saliente de la FULP), cierran su apoyo a la candidatura a un nuevo rectorado de ajuste y privatización de la universidad.

¿Por qué los K convocan un congreso vaciado a fin de año?

En los últimos años, con la conducción del Frente de Todos de la federación, se hizo habitual que la actividad cotidiana de la Fulp y sus congresos sean cáscaras vacías. Pero la convocatoria a este congreso llama la atención, porque será el más vaciado de la historia.

¿Para qué convocar antes de renovar los mandatos en las elecciones que vienen con los estudiantes en las aulas? ¿Por qué hacerlo evitando tomar posición o discutir algún plan de acción en defensa de la educación pública?

Fundamentalmente, la convocatoria persigue el objetivo de reforzar la conducción de la federación con agrupaciones del Frente de Todos que se encuentran hoy por fuera. De esa manera, el peronismo abordaría dos problemas: por un lado, plantar a la Fulp como un escollo a las luchas estudiantiles contra el gobierno que defiende su conducción. Y, por el otro, posicionar de mejor manera al peronismo en la discusión de cargos en el próximo Rectorado, que nuevamente será un pacto entre peronistas y radicales ajustadores y privatistas.

Peleemos por centros y una Fulp independiente y de lucha

Les estudiantes tenemos grandes desafíos. El ajuste del FMI impactará sobre nuestras facultades y carreras, y está en nuestras manos, junto a les docentes, defenderlas. Sin embargo, que los centros y la federación estén en manos de agrupaciones subordinadas al gobierno y al régimen universitario se presenta como una traba para desenvolver a fondo muchas de las lucha. En función de hacer pasar el ajuste, estas agrupaciones boicotean y vacían los centros que dirigen.

Para luchar en defensa de la educación y junto a les trabajadores contra el ajuste del FMI es necesario pelear por la recuperación de estas herramientas de organización. Eso permitirá profundizar las luchas que impulsamos las agrupaciones de izquierda e independientes de la UNLP, con asambleas y movilizaciones al rectorado, a la Anses, al Ministerio de Educación. Es sobre esta base que le planteamos a todas las agrupaciones independientes de los gobiernos y las autoridades actuar en un frente único común, de lucha por esta perspectiva.

Planteamos dar una lucha política común en este congreso con base en las siguientes propuestas:

-Por el rechazo al acuerdo con el FMI y sus implicancias negativas para la educación y el pueblo argentino en general. La Fulp debe movilizarse el 11 de diciembre a Plaza de Mayo con este reclamo.

-Por el rechazo a la candidatura del derechista López Armengol. Fuera los ajustadores y privatistas de la UNLP. Por la democratización de la universidad.

-Por congresos ordinarios de la Fulp en tiempo y forma sin mandatos vencidos: convocatoria al próximo congreso inmediatamente después de las elecciones estudiantiles, para que la federación sea una representación de la voluntad del conjunto de los estudiantes.

-Plan de lucha ya por todos los reclamos estudiantiles: apertura del albergue y creación de nuevas plazas; restitución del boleto educativo gratuito; comedor en todas las sedes y turnos; por un regreso a la presencialidad en condiciones.

-Asambleas en cada facultad al comienzo del año para discutir pliegos con todos los reclamos y organizar la lucha para conquistarlos.