La primera acción del año convocada por el Centro de Estudiantes de Humanidades (CeHum) de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) reunió 70 estudiantes en asamblea. Este es el dato más importante, la participación estudiantil. Una creciente inquietud recorre a los estudiantes que ven en el gobierno de Milei un enemigo declarado. El peligro de cierre de las universidades que los rectores agitaron junto al masivo paro docente del 14 de marzo logró que la enorme mayoría de los estudiantes preste atención al problema de la asfixia presupuestaria.

Milei nos declaró la guerra congelando el presupuesto a niveles del año pasado cuando ya le pasaron más de 300 puntos de inflación por arriba. Es decir que si en abril de 2023 la Unsam recibió 1.000 millones de pesos ahora recibe lo mismo, pero equivalen a 250 millones. Eso, sin contar la inflación que vaya a haber el resto del año. Si ya teníamos becas miserables, escasa oferta horaria, falta de aulas, bajos salarios y una deserción de 4 de cada 10 estudiantes, la masacre presupuestaria actual va a arrasar la universidad. Qué esperar del presidente que en el Foro de las Américas dijo que la educación pública es “un mecanismo de lavado de cerebros”.

Todo el debate en la asamblea giró en torno a cómo defender la universidad. Para el 10 y 11 de abril está convocada una jornada de protesta y visibilización del Frente Sindical Universitario (FSU) en todo el país dándole continuidad al masivo paro nacional del 14 de marzo. Pero en esta ocasión, el gremio docente de la unsam y la federación a la que pertenece (Fedun-CGT) no convocan a parar sino a realizar acciones de visibilización. En ese marco la conducción del CeHum (Martí/Mella y Mui/PC) propuso hacer una clase pública en la plaza de San Martín. Desde La Caldera planteamos que de no haber paro en la Unsam, las clases públicas sean en la entrada sobre la avenida 25 de Mayo para generar un impacto en la universidad y facilitar la participación. A su vez, prepararlas con un ruidazo que recorra todo el campus el lunes 11 junto al Centro de Estudiantes de Ciencia y Tecnología. Ambas propuestas apuntan a no aislarnos de la masa de estudiantes y docentes que irán a la universidad, llamar su atención y hacer crecer el movimiento. Decenas de estudiantes dieron su punto de vista en la asamblea y finalmente se aprobó por unanimidad la clase pública en el hall de Humanidades y el ruidazo. Desde La Caldera impulsamos la más amplia unidad para luchar por derrotar el plan motosierra de Milei sobre la universidad.

Los rectores y la Fedun-CGT negocian con Milei el remate de las universidades –

Hacer crecer el movimiento es la clave. Luego del parazo nacional universitario del 14 de marzo, Milei otorgó un aumento del 70% para los gastos de funcionamiento, 230 puntos por detrás de la inflación que ya pasó. Estos “gastos de funcionamiento” son los gastos en luz, gas, agua, becas, papel higiénico, etc y representan tan solo el 10% del presupuesto universitario. El otro 90% del presupuesto está destinado a salarios de docentes, investigadores y no docentes. Por lo tanto, el aumento que dio Milei fue una migaja. Pero los rectores no ponen a la universidad en pie de lucha para quebrar el ajuste. Por el contrario, en la Unsam ya dejaron a 300 estudiantes afuera de la beca de continuidad económica (unos míseros 20.000 pesos), cerraron laboratorios y entradas a la universidad, no abrieron materias en varias carreras y cerraron comisiones. A su vez, cada vez más comisiones se virtualizan, no colocan papel higiénico en los baños ni se fumiga ante una invasión de mosquitos y dengue.

Para los rectores y la dirección de Fedun-CGT de lo que se trata es lograr una negociación con Milei y llegar a algún acuerdo que permita aplicar un fuerte ajuste y compensarlo rematando sectores de la universidad. La tentativa es un avance fenomenal en la creación de posgrados, diplomaturas, cursos arancelados y convenios con empresas. Ya alquilan las canchas y pretenden arancelar el estacionamiento. La enorme capacidad de investigación científica de la Unsam se pone al servicio de empresas que se quedan con las patentes. Todos estos negocios representan el 25% del presupuesto vigente. Si la comunidad educativa no derrota al plan de Milei sobre la universidad, vamos a una Unsam mucho más privatizada donde solo quedará una élite estudiantil-científica. Hace tan solo unas pocas semanas el rector de la Unsam y actual presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) creó junto a los rectores de todo el país un Sistema de Créditos Académicos Universitarios que facilita la reforma, recorte y privatización de los contenidos de las carreras.

Es imprescindible poner en pie a estudiantes, docentes y no docentes en un plan de lucha progresivo hasta la huelga general educativa para derrotar a Milei. Desde La Caldera apostamos a la unidad más amplia para impulsar acciones en defensa de la unsam. Hay fuerzas y podemos ganar.

Vamos por eso.

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