Universidad

20/6/2002|759

La dimensión desconocida… en Psico

Dicen que las paredes oyen, pero a veces también hablan…. Casi accidentalmente, los compañeros del Nuevo Centro de Estudiantes de Psicología descubrimos un mundo aparte, oculto y turbio, en uno de los espacios del Centro que la Franja entregó el año pasado cuando perdió las elecciones.

 

Resulta ser que la caída accidental de una estantería sobre una pared del local de apuntes del Centro produjo una pequeña abertura que nos hizo encontrar “otro mundo”.

 

¿Qué había allí? Más estanterías, más apuntes, una fotocopiadora y hasta una oficina. Luego de revisar bien “el otro lado”, encontramos hasta recibos de Planes Trabajar, una hoja manuscrita con un balance del Centro del año pasado (donde figuran hasta las rentas que cobraban los militantes de la Franja de Psico) y hasta documentación de los ministerios donde ejercían sus funciones los ex militantes de la Franja que luego devinieron en funcionarios del gobierno nacional aliancista. Se suma esto a la terrible irregularidad con que la Franja nos entregó el Centro, el cual dejó totalmente vacío (con cero peso de caja y sin las computadoras, fotocopiadoras y otros elementos que eran del Centro).

 

La difusión pública de las pruebas trajo una tremenda repercusión en la Facultad. Era notorio que los estudiantes se quedaban azorados frente a las carteleras del Centro donde se exponían las fotos de “la dimensión desconocida” y las copias de la documentación encontrada. Muchos se hacían eco del “Que se vayan todos” y pedían directamente la cabeza de los morados.

 

Como último manotazo de ahogado, el ex presidente del Centro, militante de la Franja, le envió al actual presidente del Centro una carta documento “intimando” a rectificar lo que es imposible de ser rectificado. La caradurez no tiene límites. A las “servilletas” de Corach y los “papelitos” de Alfonsín en el Senado se suman los chanchullos de sus aprendices morados en las facultades.

 

Esta “dimensión desconocida” refleja el terrible grado de descomposición del régimen. Los pichones de Shuberoff y de los actuales decanos de las facultades (hasta el día de hoy, a pesar de haber perdido las elecciones, militantes de la Franja son funcionarios en las facultades, como en el caso de Psico) se van quedando cada vez más solos, luego de la catástrofe electoral de los últimos años que los llevó a perder una gran cantidad de centros de estudiantes que, con el correr del tiempo, vemos para qué eran utilizados: políticas privatistas, aranceles encubiertos y para el curro, al igual que Shuberoff.

 

En Psico, deschavada toda la “dimensión desconocida”, todo el “chanchullo”, hemos recuperado el Centro a favor de la organización de los estudiantes: en poco tiempo ya hemos entregado más de 1.500 becas, hemos logrado mantener el precio de los apuntes a pesar de la devaluación y el desabastecimiento, estamos impulsando un Cuerpo de Delegados para profundizar la lucha contra las políticas limitacionistas y los cupos del decano, además de que este Nuevo Centro ya ha tenido su “bautismo de fuego” en los cacerolazos del verano, en las movilizaciones piqueteras y en la Marcha Nacional Universitaria.

 

Siguiendo el ejemplo de los trabajadores que recuperan sus sindicatos, como el Soip de Mar del Plata, en Psico echamos a la burocracia para que por primera vez en muchos años el Centro se ponga a la cabeza de todas nuestras luchas. Y ya lo estamos logrando.