Finalizadas las elecciones, un hecho que se hizo notar fue que en la Facultad de Ciencias Sociales (FSOC) a muches compañeres extranjeres no se les dejó votar, ni para centro de estudiantes ni para consejo directivo. Esto se dio porque muches aún no contamos con el DNI argentino, único reconocido por las autoridades para poder votar, desconociendo los documentos de nuestros propios países. Quienes pudieron ejercer el voto mostrando el DNI se los marcaban como observado, siendo posteriormente desconocidos o sin tener certeza de ser reconocido por la junta electoral.

El caso más sobresaliente en esa misma semana fue el de una compañera que tuvo que ir con apoyo de distintas agrupaciones después de ser ignorada por las autoridades cuando fue a reclamar. Solo a partir de este caso, les extranjeres pudimos votar cuando quedaban dos horas para cerrar las urnas en el último día, aunque como explicamos previamente estos fueron desconocidos por la junta.

¿Cuál es el sentido, entonces, del DNI provisorio del CBC en el padrón?, ¿por qué no podríamos mostrar nuestro documento de origen?

Este hecho ocurrido en FSOC no es aislado, pues ya el año pasado la Corte Suprema le dio la razón a las autoridades (permitido por rectorado y decanato) en el que se le impedía a una persona de nacionalidad peruana con condena a estudiar la carrera de sociología invocando una ley sancionada en la dictadura de Onganía (17.671) sancionada en 1968 en el mismo contexto de “la noche de los bastones largos”, que establece acreditar identidad solo y únicamente con el DNI en instituciones como las educativas entrando en conflicto con la Ley de Migraciones donde se sostiene que ningún supuesto la irregularidad de un extranjero posibilita impedir su admisión como alumno en un establecimiento educativo, pidiendo acreditar su documento de país de origen.

A raíz de estos precedentes, estudiantes migrantes autoconvocades se han estado reuniendo para ver cómo afrontar la ley de Onganía, los cursos de idiomas arancelados, los vacíos administrativos en lo que respecta a documentaciones, ya que por pandemia demoró aún más el trámite DNI (suele demorar mínimo 6 meses) entre otras formas que nos condicionan a les extranjeres y que hechos como los ya mencionados también chocan contra la Ley de Nacional de Migraciones.

Estas contradicciones legales se prestan a interpretación y la FSOC alegando “autonomía” ha estado remando a favor de tal ley discriminatoria. Está resolución es, sin lugar a dudas, un salto en el carácter excluyente y antidemocrático del régimen universitario.

Justamente cuando hay un discurso reaccionario y derechista que tiene como referentes a Pichetto y la ultraderecha en contra de los extranjeros con dichos como “no pagan impuestos”, “los mantenemos gratis”, etc., que son absolutamente falsas, porque se paga IVA, cuentas de luz, agua y se viven las mismas problemáticas como lo que refiere a vivienda y alquiler, entre otras.

Sin embargo, cuando vienen las transnacionales estos dirigentes reaccionarios de los multimillonarios hacen silencio y aprueban, en total, no importa si eres argentino o no, te cambian el curso del agua, instalan megaminería, precarizan laboralmente,o nos ajustan con el FMI y si se protesta nos criminalizan en común como en el caso de Jaru (donde además se armó una campaña mediática destacando su nacionalidad venezolana) y los compañeros detenidos injustamente.

A partir de esto, llamamos a les estudiantes de toda la UBA a sumarse a esta campaña en defensa de nuestros derechos democráticos y que se respete como a toda la comunidad estudiantil, como así también a repudiar una medida de claro contenido xenófobico por parte de las autoridades de la UBA y a mostrar interés por las iniciativas que les estudiantes extranjeres vayamos impulsando.

https://prensaobrera.com/universidad/eleccion-de-rector-en-la-uba-que-nos-deja-alberto-barbieri-con-su-salida/