El pasado lunes, ante el inmovilismo de la conducción del centro de estudiantes (conducido por la JUP), lxs estudiantes de Trabajo Social se autoconvocaron en una asamblea masiva para llevar adelante un plan de acción que permita enfrentar el ajuste del gobierno a la educación pública y en defensa de la lucha imparable de lxs docentes. Lo mismo ha ocurrido en la Escuela de Arte Leopoldo Marechal ante la falta de convocatoria de una Asamblea por parte del centro, en este caso en manos del PC. 

Los reclamos en la UNLaM remiten, por un lado, a los aranceles que se cobran: desde la inscripción al curso de ingreso que alcanza los 500 pesos (la universidad cuenta con más de 50 mil estudiantes) hasta los postítulos pagos que generan cajas paralelas millonarias, sin olvidar los negocios de la familia del propio Rector (call center privado) y la penetración de empresas privadas como ocurre en la Expoempleo. Todo bancado por el Centro de estudiantes. Y por otro lado a la falta de democracia, persecución a docentes y estudiantes y la falta de políticas para las problemáticas de la mujer. Se trata de una lista histórica de reivindicaciones pendientes que se ponen de relieve en esta rebelión educativa. 

La UJS-Partido Obrero, junto a otros grupos de izquierda, se hizo presente en la Asamblea de Trabajo Social para llevar la iniciativa de que lxs estudiantes se unan a la que estaba convocada por organizaciones independientes, previamente, para el martes. Así logramos unir los espacios democráticos de intervención y formar la Asamblea estudiantil de la UNLaM. Las resoluciones votadas por mayoría pasaron desde movilizar a la convocatoria del jueves 30, el repudio a Vidal por la muerte de los compañeros Sandra y Rubén (docentes muertos tras la explosión en la escuela 49 de Moreno), el pronunciamiento por la separación de la Iglesia y el Estado y el aborto legal, hasta la solidaridad con los trabajadores de Astilleros. Quedó demostrado que el movimiento estudiantil toma en sus manos las luchas obreras que están en curso. Lxs jóvenes de La Matanza están dispuestos a encabezar un estudiantazo, el único obstáculo es la burocracia estudiantil y sindical que funciona como una red de contención para frenar cualquier rebelión. 

En el caso de la UNLaM, Liga Federal Universitaria-JUP juega un rol reaccionario frente a este escenario de lucha y de complicidad con el recorte presupuestario y el ataque al salario docente. No sólo por no ponerse a la cabeza de la lucha que está en curso, sino por avalar todas las medidas impulsadas por el rector macrista Daniel Martínez, quien además se acaba de reunir hace apenas unos días con el presidente para seguir adelante con el ataque a la educación. La LFU se hizo presente en la movilización del jueves 30 con una columna vacía de estudiantes y la presencia de barras, como acostumbra a hacer, esa es la prueba fiel de su falta de política para lxs estudiantes y sus lazos con la patota. 

Pero la contención no sólo está liderada por el pejotismo, sino que incluye también a Estudiantes Autoconvocados, Sur y Unidad Ciudadana. No sólo no convocan a las asambleas, sino que consideran que no es el método que debe seguir el estudiantado. Por eso mismo convocan a actividades que, según las describen, son más "institucionales". Como por ejemplo "Abrazos a la Universidad" o realizan Ferias de Apuntes mientras realizamos las asambleas. Siguen el camino de la Franja Morada y el PJ mientras se está desenvolviendo en la Universidad de La Matanza una lucha inédita.

La repuesta a esta contención es la organización estudiantil independiente del Rectorado, el centro y sus cómplices para organizar un plan de lucha. El día jueves 6 de septiembre se realizará una nueva asamblea abierta que convoca a docentes y no docentes, además de estudiantes y organizaciones.

La masiva movilización del jueves 30 de agosto mostró la fuerza del movimiento estudiantil y la docencia para enfrentar al gobierno. Sigamos esta lucha a través de los métodos históricos del movimiento obrero.