Los CBCs de la UBA se levantan al calor de la creciente rebelión universitaria. Cientos de estudiantes se organizan impulsando reuniones, asambleas, ruidazos, clases públicas junto a docentes y se preparan a pintar banderas de sus sedes para participar masivamente en la marcha del 23 en defensa de la universidad pública.

Miles de estudiantes hacen sus primeros pasos incorporándose a la lucha contra la motosierra de Milei sobre la educación pública, refutando a quienes pregonaban que la juventud se había convertido en libertaria o que los estudiantes de los CBCs son indiferentes porque todavía “no son parte de las carreras”.

El gobierno que nos quiere arrebatar el futuro tocó una fibra sensible de nuestro pueblo y va a temblar este martes 23 cuando copemos la Plaza de Mayo. Milei despertó un gigante. Somos más de dos millones quinientos mil estudiantes, docentes, no docentes e investigadores en la universidad pública y con nosotros vienen nuestros amigos, familias, trabajadores y el pueblo en general. Tenemos la fuerza para quebrar el macabro plan de cerrar las universidades que supimos defender en momentos clave de nuestra historia nacional. Milei no es el primero que nos intenta reventar y tampoco será el primero en lograrlo.

Levantemos nuestras banderas

Abandonados por la Federación Universitaria de Buenos Aires (Fuba) y sin centros de estudiantes, la organización estudiantil en los 26 CBCs crece desde abajo. La presencia de varias sedes con sus propias banderas va dando cuerpo a un activismo estudiantil que se pone al hombro la masificación de la jornada del 23 mientras debate las problemáticas particulares de los estudiantes ingresantes. Detrás del reclamo del presupuesto y el no cierre de las universidades aparecen los reclamos de comedores a precios accesibles, que todos puedan elegir el horario y sede de cursada, salario para los cientos de docentes precarizados, calefacción en invierno, papel higiénico en los baños, más aulas para que nadie curse desde la puerta o el pasillo, becas, boleto educativo, iluminación nocturna hasta las paradas de colectivo, etc. El 23 también marchamos por estos reclamos.

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No se nos escapa que gobierno tras gobierno metió la mano en el presupuesto universitario. Tampoco que las autoridades universitarias con quienes marcharemos el 23 tienen sus propios intereses. Aunque ahora salen a la calle por un presupuesto mínimo que garantice el funcionamiento básico (luz, agua y gas), hace mucho tiempo que recortan contenidos en las carreras creando posgrados arancelados, subordinan las investigaciones científicas a los requisitos de las empresas a cambio de plata, dejan a miles de docentes en la absoluta precariedad sin pagarles siquiera un salario (los famosos docentes “ad honorem”), callándose ante becas miserables de 20.000 pesos como la Progresar. Somos conscientes que las autoridades universitarias pertenecen a espacios políticos (radicalismo, Pro, peronismo) que se aprestan a votar en el Congreso Nacional grandes ataques y retrocesos para nuestro pueblo como la inminente reforma laboral. Por eso les advertimos. No estamos dispuestos a entregar la lucha por la universidad pública, laica, gratuita y de calidad. Peleamos para que no cierren las universidades y a la vez para que se llenen de estudiantes y les paguen bien a nuestros docentes, para desarrollar la ciencia y la técnica y orientar el conocimiento científico al servicio de las necesidades populares.

Seamos un factor activo y consciente

El 23 vamos con todo y con todos a defender la universidad. Pero si el gobierno no otorga el presupuesto necesario para satisfacer todos los reclamos de los estudiantes, docentes, no docentes e investigadores, redoblemos la organización en un poderoso plan de lucha hasta ganar. Quedan 24 horas hasta la marcha que probablemente quede escrita en las páginas de las grandes acciones del movimiento estudiantil y educativo argentino. Multipliquemos los esfuerzos para ser millones. No puede faltar nadie.

La UJS, agrupación estudiantil que activa en todas las facultades de la UBA y en 10 CBCs, pone toda su energía en colaborar con la organización de los estudiantes. La semana pasada difundimos en cada curso la situación de la universidad y nos preparamos para el 23 impulsando asambleas en Paternal, ruidazos en San Isidro, cartelazos en Ciudad, reuniones abiertas en Avellaneda y Tigre, cacerolazos educativos desde Puan y decenas de clases públicas en los CBCs. Este lunes 22 vamos a nuevas acciones, reuniones, pasadas por curso y pintadas de banderas.

Ya somos millones defendiendo la universidad. El 23 copemos Plaza de Mayo y gritemos fuerte “la educación no se vende, se defiende”.

https://prensaobrera.com/universidad/23-de-abril-es-milei-o-la-universidad