Universidad

25/11/1999|649

Nacional Buenos Aires: Gran elección del Frente de Lucha

Cuando, hace dos años, el Frente de Lucha fue derrotado en las elecciones de Centro de Estudiantes, se caracterizó en este periódico que “podía ser útil”. El Frente se había convertido en una traba para el desarrollo de un agrupamiento combativo y un terreno de compromisos podridos con sus elementos frenadores.


La ruptura con esos elementos debía servir para recuperar una iniciativa de acción. Esta caracterización se probó más que correcta. El intenso trabajo que a partir de entonces desarrolló la Unión de Juventudes por el Socialismo permitió que el Frente de Lucha renaciera como un reagrupamiento con fuertes posiciones políticas en el Centro y para ganar a numerosos delegados en una experiencia común.


La caracterización también fue correcta en cuanto a lo nocivo de los sectores con que rompimos. Estos, con diferentes nombres (PyA, Frente 18), dirigieron el Cenba los dos últimos años y se limitaron a hablar de participación en abstracto mientras el rector Sanguinetti nos reventaba la cabeza con medidas autoritarias, llegando este año a echar a noventa alumnos por la realización de la llamada “vuelta olímpica”. Cada año, este grupo se veía obligado a entrar en nuevas alianzas de último momento para retener la dirección.


 


Para que el Centro vuelva a los estudiantes


Finalmente, la dirección del Centro disolvió su agrupación y formó una nueva, El Puente, dos semanas antes de las elecciones. Incluye al LEI, cuya política es difícil de diferenciar de la misma Franja Morada. El LEI encabezó la lista con una campaña contra el Centro.


El Frente de Lucha, agrupando cada día a más activistas, en particular de los cursos inferiores, demostró en su campaña que estos ‘nuevos’ eran los de siempre, los que habían provocado derrota tras derrota. Destacamos la actividad que había llevado el Frente de Lucha, sin ser dirección, frente a los principales problemas de este año (lucha contra el recorte educativo, 90 alumnos libres por la vuelta, lucha de los profesores por sus salarios). Resaltamos que había recaído sobre el Frente de Lucha organizar y convocar a las asambleas y medidas de lucha en respuesta a estos temas, mientras la dirección del Centro representaba una traba a la movilización. El eje de la campaña del Frente de Lucha Estudiantil fue preparar a nuestro Centro para el recorte a la universidad y los intentos de aplicar la privatista Ley Federal del recién electo De la Rúa.


Aparte del FLE y El Puente, se presentó a las elecciones la Franja Morada que había dejado de participar en el Centro hacía un año, prefiriendo el Consejo Asesor, espacio completamente regimentado por Sanguinetti. La Franja había ganado en junio unas elecciones para estos Consejos en un clima de casi proscripción.


 


Resultados y perspectivas


El Puente logró disimular su procedencia lo suficiente como para ganar las elecciones, pero cayendo en votos (800, contra 1.000 del LEI y el Frente 18).


El Frente de Lucha duplicó sus votos hasta cerca de los 500. En ciertos claustros, obtuvo la victoria absoluta. Consiguió dos vocales a la Mesa Directiva del Cenba y colocó representantes en todos los consejos institucionales (Consejo Asesor y tres Consejos de Convivencia, uno por turno). El salto más importante, sin embargo, no fue en lo electoral sino en la intensa campaña de agitación, así como también en la cantidad de chicos que se han organizado en el FLE, haciendo que éste se vuelva a sentir con fuerza en el Buenos Aires.


La Franja cayó a unos 350 votos, perdiendo toda representación en sus queridos Consejos.


Estos resultados aseguran que las próximas luchas tienen una dirección. Ante el nuevo ajuste de De la Rúa, va a seguir siendo el FLE el que de una respuesta a los alumnos y vuelva a dirigir un gran Cenba. ¡Vamos, Frente de Lucha!