Octava semana de toma en el Comahue

Profunda lucha de los estudiantes universitarios


La lucha que comenzó por el aumento del número de representantes estudiantiles en los órganos de gobierno de la Universidad Nacional del Comahue, y la inclusión de los auxiliares y ayudantes no concursados en el claustro docente (actualmente sólo tienen derecho a voto los titulares de cátedra, sus adjuntos y asociados), enfrenta ahora al nuevo rector, Boccanera, designado por las camarillas. Todo el arco político patronal ha salido en apoyo del rector, desde Sobisch hasta el kirchnerismo, y Jesús Escobar, de Patria Libre.


 


El rector trucho dice que los únicos que tienen condiciones para resolver las cuestiones de la universidad son los ‘profesionales’. Nadie, entonces, puede cuestionar la autoridad de las camarillas para rematar la Universidad.


 


A medida que se profundiza la lucha, y sobre todo las tomas, los medios han dado un giro violento contra nosotros. Los diarios regionales han dedicado páginas enteras a difundir mentiras, propagandizar las acusaciones falsas de las autoridades y políticos patronales. Planteando que, como consecuencia de las tomas, correrían el riesgo de cerrarse proyectos de investigación, se perdería el cuatrimestre y aumentaría la deserción estudiantil y a la educación privada. Nada más falso.


 


Vamos a un desenlace. El autoproclamado rector Daniel Boccanera no ha podido desactivar ninguna toma. Incluso su intento (junto a todos los kirchneristas) de realizar una movilización contra la toma para “liberar” la casa de estudios de “los inadaptados”, fracasó estrepitosamente. No juntó más de 500 personas, entre las que abundaban punteros de Barrios de Pie y del Municipio local, los funcionarios de la Universidad, los profesores y un reducido grupo de estudiantes. Del otro lado, en el piquete, defendiendo la toma, más de 800 estudiantes, más grupos de las organizaciones, de Zanón y del Polo Obrero.


 


Esta carencia de apoyo popular ha profundizado la crisis entre las camarillas.


 


La UJS-PO está totalmente comprometida en el triunfo de esta lucha.


 


El PCR lleva adelante una política liquidacionista de las tomas; en la última asamblea de la Facultad de Roca, una de las facultades importantes que no se tomó y cuyo centro conduce, se pronunció contra la toma de la Facultad y sólo por seguir la toma del Decanato. Esta política derivó que esa misma asamblea votara, por escasa diferencia de votos, levantar la toma del Decanato. Tiene un “frente amplio” con sectores docentes que no apoyan el reclamo estudiantil (sólo el claustro único).


 


El MST-2, con presencia sólo en la Facultad de Ciencias de la Educación, ha salido a plantear a los activistas que esta lucha ya está agotada y hay que agarrar cualquier cosa para levantar.


 


Por último, el FER (agrupación independiente, conducción de la FUC) persigue un acuerdo para bajar a Boccanera con las camarillas que se quedaron sin nada en la repartija. Nosotros acordamos con el objetivo (bajar a Boccanera), pero sin abandonar la agitación callejera, en los secundarios, etc. Por este camino se va a una transa. No es casualidad que esa política de transa llevara a la Federación a permitirle al MNR, conducción de Economía (que estaba tomada), que entraran en la Facultad un centenar de estudiantes “autoconvocados” que venían de la movilización del gobierno para realizar una asamblea. Sólo por la falta de organización de estos estudiantes oficialistas y la presión de la UJS y de algunos estudiantes independientes, la demagogia no derivó en el levantamiento de la toma de la Facultad de Economía.


 


Desde la UJS estamos impulsado la acción del conjunto de los estudiantes para que caiga Boccanera y abrir un proceso en el que podamos imponer nuestras reivindicaciones, la reforma del estatuto, y un avance contra las camarillas privatistas.