El viernes 14 de mayo se llevó a cabo una nueva reunión de Junta de la Carrera de Comunicación Social, en medio de una crisis que atraviesa la Facultad de Ciencias Sociales producto del ajuste presupuestario y una guerra entre camarillas. Este enfrentamiento se expresó en las acusaciones cruzadas entre el sector de Nexo-La 15 (La Cámpora y La Mella) que responde a la gestión de la facultad y La UES (PJ) que tributa al Rectorado de la UBA. Debido a estas alianzas con la decana Carolina Mera (Nexo-La 15) y con el rector Alberto Barbieri (La UES), las disputas entre estos espacios políticos estuvieron lejos de los problemas que aquejan a docentes y estudiantes de Sociales.

Desde La Izquierda en Comunicación presentamos a la Junta proyectos para atender diversas problemáticas: la liberación de las patentes y la producción de vacunas, el apoyo a la rebelión popular en Colombia, el reclamo por la aparición con vida de Tehuel y la aplicación del cupo laboral travesti-trans en Sociales y en la UBA, el repudio al procesamiento a les estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba que participaron de las luchas de 2018, y el rechazo a la libertad condicional otorgada a Pablo Díaz -uno de los responsables del asesinato de Mariano Ferreyra.

Un último proyecto planteaba una exigencia de mayor presupuesto para educación al gobierno y al Rectorado de la UBA. Es una respuesta al ajuste efectuado en el Presupuesto 2021 (17% de aumento que fue superado ya en el primer cuatrimestre), la eliminación del IFE y los rechazos masivos en la Beca Progresar, que acentúan las dificultades para cursar y profundizan la deserción estudiantil. Este proyecto fue aprobado por la mayoría de les consejeres de la Junta, incluyendo al espacio que dirige la carrera y la facultad (ligado al gobierno nacional), el cual durante el año pasado había rechazado dos proyectos sobre esta misma problemática, pero ya no pueden negarse a apoyar un reclamo tan sentido.

La asamblea autoconvocada de Sociales del sábado 8 de mayo, que tuvo como grandes ausentes a La 15 y a La UES, muestra un camino de la organización para pelear por todas nuestras reivindicaciones. Se votó impulsar un mailazo a la gestión de la facultad con los diferentes reclamos de estudiantes, docentes y no docentes, y el apoyo a las instancias de lucha con la juventud piquetera por conectividad, becas y presupuesto.

La situación de asfixia presupuestaria que sufren la UBA y la Facultad de Sociales no va a ser resuelta por la guerra de las distintas camarillas, que lejos están de las problemáticas de les estudiantes y les trabajadores de la educación. En medio de esta disputa ajena a nuestros intereses, la pelea por la democratización de los órganos de cogobierno de las carreras, la facultad y la universidad es una tarea primordial. Desde la UJS llamamos a les estudiantes a organizarse de manera independiente de estos dos bloques, y a profundizar la pelea en defensa de nuestras condiciones de cursada.

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