La próxima semana se desarrollarán las elecciones del Centro de Estudiantes del departamento de planificación y políticas públicas en la Universidad de Lanús (UNLa). Tendrán lugar en un contexto marcado por la avanzada del gobierno contra la educación pública, las propuestas miserables en la paritaria docente y los recortes presupuestarios.

La gestión de la rectora Ana Jaramillo no sólo no se opuso a esta política, sino que se ha dedicado a administrar el ajuste del gobierno. Siguen en pie, por otra parte, el ingreso eliminatorio con cupos que dejan miles de estudiantes afuera cada año, las concesiones privadas (fotocopiadora y buffet), los acuerdos privatistas con empresas de la zona, la escasez de oferta horaria y la inexistencia de cátedras paralelas.

En este cuadro, daremos la pelea por  un Centro de Estudiantes que sea independiente de todos los gobiernos y de la gestión de la UNLa, en manos del FpV–PJ, que ejerce una fuerte regimentación sobre el movimiento estudiantil. La izquierda, reagrupada en el Frente de Estudiantes en Lucha, tiene como perspectiva realizar una gran elección, luego de los buenos guarismos obtenidos en la reciente elección de Consejo Superior (18%).

La conducción actual del centro de planificación y políticas públicas, en manos la lista “Somos UNLa en políticas públicas” (La Cámpora, Peronismo militante y otros) ha mantenido al centro sujeto a la voluntad del Rectorado.  No han organizado la pelea por ninguno de los problemas elementales de los estudiantes, ni tampoco frente a las medidas de ajuste más generales que lleva adelante el gobierno nacional.

 

Un frente para organizar al movimiento estudiantil

El Frente de Estudiantes en Lucha está encabezado por la UJS y participan en él todas las agrupaciones de izquierda del departamento (EPE, HLI, MAS). Levanta un programa para enfrentar el ajuste que desarrollan el macrismo y sus socios contra la educación pública, y su correlato al interior de la UNLa.

Necesitamos seguir ampliando el campo del movimiento estudiantil independiente al interior de la universidad, como lo venimos haciendo tras la victoria en el Centro de Estudiantes de Desarrollo Productivo y Tecnológico y en las recientes elecciones de Consejo Superior.

Continuemos profundizando esta tendencia, para enfrentar el ajuste, dar la pelea por los reclamos estudiantiles y defender la educación pública. Vamos por un centro independiente de la gestión que organice al movimiento estudiantil.