Les vecines de los barrios circundantes denuncian venta de loteos, usurpación y usucapión (adquisición de la propiedad por posesión continuada en el tiempo) por parte de ‘ricos’ en una zona altamente sensible en términos ambientales.

El humedal, el mallín, del kilómetro 11/12 fue loteado en el año 1938. Una familia alemana lo compró y buscó construir, pero al estar bajo la cota de agua suspendió cualquier intento. Para el año 2003 todo ese loteo estaba abandonado y con una millonaria deuda.

De acuerdo a una entrevista radial que trascendió, Paula Nye, vecina de la zona, explica que “la familia alemana no vive ahí, se trata de una sucesión y los herederos están en Buenos Aires pero no les dan datos concretos [a les vecines, sobre quienes son]”. Y el abogado que está a cargo de la sucesión tampoco les pasa datos concretos.

Mientras tanto, avanza la usurpación y usucapión. Pero el peligro radica en la posibilidad de contaminar la zona si se empieza a rellenar este filtro natural (el mallín) de los drenajes que van al lago Nahuel Huapi. No solo que se perdería el humedal en sí, sino que también se empezarían a contaminar las aguas, primero de Bahía Serena (una de las pocas playas que les queda a les vecines de Bariloche) y obligatoriamente las de todo el lago Nahuel Huapi llegando hasta el río Limay.

Les vecines han denunciado la situación, pero cada vez que viene el área correspondiente a hacer una infracción solo encuentra a obreros trabajando (por eso usurpación V.I.P.) y nunca al dueño, por lo que las infracciones no se firman y los obreros siguen trabajando como si nada. A partir de esto, les vecines sospechan que no hay herederes porque nadie firma ni paga y ni siquiera une abogade se hace cargo de la situación. Al mismo tiempo, el Departamento Provincial de Aguas (DPA) obligó a la Junta Vecinal a darle agua a la usurpación (legalizándola en los hechos) pese a que les vecines desde hace más de un año
solicitan información sobre dueñes.

A partir de este último hecho, les vecines enviaron una nota al DPA pero este tarda alrededor de cuarenta días en contestar. Existe una contradicción muy grave, la ley en la que se avala al DPA todo el tiempo hace
mención al ambiente y el DPA ampara el patrimonio natural. Al mismo tiempo, no se comprende que en un mallín, donde el terreno está por debajo de la cota de agua, el DPA obligue a la Junta Vecinal a entregar agua a una usurpación V.I.P., hasta que se entiende el suceso como una legalización en los hechos.

No hay transparencia en todo este asunto y la Junta Vecinal tampoco da información, pese a solicitarla de forma oral y escrita. Mientras que algunas usurpaciones avanzan, se concretan y hasta consiguen la titularidad, otras aparecen y desaparecen muy ágilmente, sobre todo las ocupaciones por parte de familias pobres, sin techo, que el gobierno desaloja permanente, o incluso pueblos originarios.

En mayo apareció otra área de terreno usurpado que fue desalojada por la municipalidad al mes cuando empezó a colocar unos pilotes de hormigón para construir. Entonces, ¿por qué erradican a algunes y a otres les dejan? Paula Nye se pregunta: “¿Por qué no quieren darle datos de los herederos, para avisarles que les están invadiendo su propiedad? (…) Y en todo caso, si hay una deuda, ¿por qué el municipio no protege a la comunidad y al patrimonio natural y se hace cargo? Que nombre el área zona intangible y la deje protegida de cualquier posible contaminación. “¿Por qué echan a algunos y a otros los dejan? ¿Quiénes son los herederos? ¿Por qué hay usucapión? (…) Según el abogado que está a cargo de la sucesión ningún lote está a la venta, mientras tanto hay personajes en el mismo barrio que están adquiriendo lotes por usucapión y no se entiende a quién, cómo, dónde, cuándo”, declara Nye. Y cierra manifestando que “es importante que todes les vecines empiecen a participar para que la política no haga lo que quiera”.

Coincidiendo con Paula Nye, desde Tribuna Ambiental exigimos información pública y transparencia en la toma de decisiones al respecto. Acá no se trata de una toma de familias vulneradas que no tienen otra chance de acceder a la tierra o a la vivienda, les vecines hablan de una usurpación V.I.P. en una zona con un muy delicado equilibrio ecosistémico que se esta viendo flagrantemente vulnerando.

Denunciamos los hechos perpetrados por el Estado, por acción u omisión, llamamos a la conformación de políticas preventivas, la consolidación del área como zona intangible y la puesta en marcha de un plan de viviendas Integral que resuelva la falta de tierra y vivienda de incontables familias en la localidad y genere empleo.

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