Ambiente

1/6/2023

Estudiantes de carreras de salud participamos de las Pasantías Ambientales Interdisciplinarias de la UJS y Tribuna Ambiental 

Una experiencia de formación y de lucha.

Foto: corresponsal.

El fin de semana largo que comenzó el 25 de mayo, estudiantes de las distintas facultades de salud de la UBA y de otras facultades participamos de las Pasantías Interdisciplinarias de la UJS y de Tribuna Ambiental, con la intención de participar de experiencias de formación que cuestionen la orientación de las universidades. Por un lado, fomentando el trabajo interdisciplinario entre las distintas carreras, hicimos un relevamiento socioambiental en la localidad de Zárate, para recoger las distintas problemáticas de salud consecuencia de la contaminación. Y por otro, desde el Centro de Estudiantes de Veterinaria, realizamos jornadas gratuitas de vacunación y desparasitación, poniendo nuestros conocimientos al servicio de las necesidades del barrio.

El avance de la crisis, la depredación ambiental y sus consecuencias en la salud

En este contexto, en el que el mismo ministro de Ambiente Cabandié se sinceró sobre cómo es que su gobierno pretende pagar la deuda (contaminando), está claro que el saqueo de los recursos naturales está a la orden del día. El Paraná es un recurso estratégico para el capital, porque es una vía de paso para el comercio internacional. Se llevaron adelante excavaciones para permitir el paso de los buques por la llamada Hidrovía, dando lugar a la inestabilidad de los terrenos, a su inundación, y también a la remoción de posibles contaminantes estancados en el fondo de la rivera.

Por otro lado, es un objetivo crucial para la especulación inmobiliaria. Es por esto que el Club Náutico de Zárate pretende desplazar a las poblaciones isleñas de sus tierras ancestrales, para la expansión de sus instalaciones de acceso para billeteras millonarias, con fuerzas de choque y quema de casillas. Esto ha obligado a les isleñes a refugiarse en carpas, para resistir ese avance. Estas situaciones de violencia, que cotidianamente sufre esta comunidad, son avaladas por la Prefectura Naval, que acompaña los desalojos forzados. En estas condiciones, les vecines sufren el estrés físico y psicológico que les genera quedarse sin su hogar, y no tienen garantizadas ni condiciones de higiene ni el acceso al sistema de salud; asimismo, dependen de sus vecinos para cruzar el río, puesto que el Estado no ha dispuesto más que una lancha ambulancia para todas las islas.

Además, en la localidad de Campana, el grupo Siderca-Techint ha rellenado el Arroyo de la Cruz convirtiéndolo en un enorme depósito de chatarra, donde la presencia de metales pesados se absorben a nivel del suelo, las napas y el río, y contaminan a toda la población. Les vecines nos comentaron que no se puede tomar el agua. También visitamos el Parque Nacional del Ciervo de los Pantanos, que en el último año sufrió la quema del 80% de su superficie. Allí, los brigadistas denunciaron la falta de recursos para paliar el fuego. En las islas también son comunes las quemas intencionales y las enfermedades respiratorias a causa del humo.

Visitamos también sectores aledaños a las instalaciones de Petromining, empresa radicada en África, famosa por los desmadres que realizó allí (conocida como Trafigura) y que en Campana ha instalado y pretende expandir la instalación de tanques de petróleo sobre zona de humedales. Además, libera hidrocarburos hacia el exterior, con su consiguiente peligro de explosión. Sumada a la presencia de refinerías en la región, se trata de un factor de contaminación importante sobre la población.

Finalmente, la falta de políticas públicas es moneda corriente a lo largo y ancho del Paraná. Esto está en sintonía con el plan de pago serial de la deuda, que fielmente llevan adelante Alberto Fernández, Massa, Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof, lo que no solo garantiza el saqueo y la contaminación, sino que también produce el desfinanciamiento de la salud. Tanto en los relevamientos socioambientales como en las prácticas veterinarias, lo pudimos ver: Zárate cuenta con un único hospital, tanto este como los centros de salud periféricos se encuentran vaciados de recursos y profesionales, lo que dificulta el acceso a los turnos, los controles de salud y el tratamiento de urgencias. En la jornada de prácticas veterinarias también lo corroboramos: la gran mayoría de las mascotas de les vecines nunca fueron vacunadas y mostraban varios signos de infecciones parasitarias (ectoparásitos como pulgas o garrapatas, y endoparásitos).

Pongamos las universidades al servicio de las luchas ambientales

En un contexto de avance de la privatización sobre la educación y la salud, la lucha por una ciencia independiente y universidades al servicio de las necesidades sociales se hace cada vez más necesaria. En nuestras facultades vemos cómo las gestiones han hecho convenios con prácticamente todas las empresas contaminantes: con Monsanto Bayer en Fauba, con Shell en Exactas. Está claro que quienes son financiados por los pulpos contaminantes no llevarán adelantar la tarea de indagar, investigar y publicar estudios sobre los efectos que tienen sobre los ecosistemas y sobre la salud de las poblaciones las prácticas de estas empresas. De la misma manera, son quienes organizan nuestros contenidos académicos (porque son quienes finalmente los producen) y se garantizan así mano de obra barata y precaria con pasantías durante nuestra formación y contratando luego profesionales que apliquen nuevas formas de explotación de los recursos sin una mirada crítica que los cuestionen.

Por otro lado, el avance de la privatización en la educación es el principal objetivo de las distintas camarillas universitarias que pretenden recortar nuestros contenidos académicos y trasladarlos a posgrados pagos. Tal es el caso de veterinaria, una carrera acreditada en la Coneau; ya se rumorea que se implementaría una reforma en el plan de estudios (enfocada a recortar el ciclo superior), como ya sucediera en el año 2008, lo que significó un recorte de 54 materias con su consiguiente pasaje a posgrados. Algo similar sucede en la Facultad de Farmacia y Bioquímica, donde la acreditación a la Coneau significó la revisión de los contenidos, el cambio de plan cada diez años y potencialmente la caída de cientos de estudiantes de los planes anteriores. La lucha consecuente de la UJS-Antídoto como dirección del CEFyB logró frenar esa última avanzada. En Medicina, las autoridades pretenden acreditar la carrera en la Coneau para poder garantizar lo que ya sucede en otras facultades de Salud: el recorte de contenidos y su pasaje a posgrados pagos (y por lo tanto títulos de grado desvalorizados y profesionales precarizados y mal pagos). De esta manera las autoridades universitarias pretenden producir los futuros científicos y profesionales de la salud, para abastecer al mercado.

Es por esto que desde la UJS y Tribuna Ambiental impulsamos distintas pasantías interdisciplinarias, con la intención de producir investigaciones científicas independientes que se avoquen a desenmascarar el rol de las grandes corporaciones en la crisis ambiental, sus consecuencias en la salud y su directa relación con los gobiernos y los co-gobiernos de las universidades. Nos parece fundamental impulsar en cada casa de estudio una campaña en defensa del ambiente y poner las universidades allí donde tiene que estar: junto a les trabajadores que luchan en defensa del ambiente y sus condiciones de vida.

Es por esto que impulsamos una gran asamblea de salud para el 8 de junio en la Facultad de Medicina y una gran comisión ambiental en el Plenario de la Izquierda convocado por el Partido Obrero y el MST para el 17 de junio en Plaza de Mayo.

¡Defendamos el ambiente y la salud con la izquierda que se planta!