Una nueva Asamblea de Vecinos de Ensenada agrupados bajo el lema “Ni un arbol menos en Ensenada”, realizada el pasado viernes, ratificó el plan de acción votado anteriormente y a su término se realizó una concentración frente a la sede municipal. Se decidió continuar juntando firmas en el petitorio a entregarse este lunes con una nueva concentración frente al Municipio.

Los funcionarios municipales acusaron recibo de la actividad de los vecinos en defensa del arbolado contestando desde las redes sociales con argumentos poco consistentes en defensa de la gestión. Esto fue una motivación mayor para los vecinos y las organizaciones que acompañan esta lucha, como Tribuna Ambiental y otras, para redoblar los esfuerzos en procura de masificar las firmas del petitorio y la concurrencia a la entrega del mismo.

Así fue que el pasado lunes se entregó el petitorio con más de 1.800 firmas tanto al Ejecutivo municipal como a los bloques del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio. Los propios concejales en persona recibieron los reclamos, y, desde el oficialismo del intendente kirchnerista Mario Secco, se intentó hacer una acalorada defensa de la gestión municipal sin encontrar eco entre los vecinos que entregaron el petitorio.

Es evidente que en una ciudad enormemente contaminada como Ensenada la defensa del arbolado público va ganando popularidad y pone en jaque la acción depredadora que ha sostenido el Municipio y su complicidad con la acción contaminante de Copetro, denunciada desde hace varios años atrás por la población ensenadense.

Con estas acciones se ha potenciado el reclamo exigiendo el cumplimiento de la Ley 12.276 del arbolado público urbano, el cese inmediato de la deforestación y la realización de un vasto plan de reforestación. La continuidad de la lucha a través de nuevas acciones será discutida el próximo Viernes 28 en la Plaza Belgrano

Tribuna Ambiental apoya todos estos reclamos porque es un enorme paso en defensa de la salud pública contra la depredación capitalista y porque es también un mojón en la constitución de comités de seguridad e higiene bajo control de los trabajadores, vecinos y organizaciones ambientales que puedan tener derecho a veto de todas las acciones municipales que atenten contra el ambiente.