Aniversarios

24/6/2022

Los piqueteros de la universidad

La masacre del Puente Pueyrredón marcó a fuego al movimiento estudiantil emergente del Argentinazo.

Foto de archivo

El año 2001 parió un movimiento estudiantil de masas, enfrentando al recorte presupuestario (13%), derrotando en las calles y elecciones a la dirección de décadas de la universidad la Franja Morada ligada al gobierno fondomonetarista. La “Franja” se había robado 2.000 planes sociales para su militancia universitaria. Al calor de la lucha, en frente único con las organizaciones estudiantiles que se referenciaban con la Asamblea Piquetera de la Matanza, articulamos la unidad en la lucha de estudiantes y piqueteros.

En el año 2002, la efervescencia universitaria se diluye un poco, en parte porque Duhalde resuelve “hacer la plancha” contra la universidad y no repetir lo sucedido con el “recorte’ al final del gobierno de Menem y luego con López Murphy de La Rúa.

El “Diálogo Argentino”

Políticamente con la ‘“Mesa del Diálogo Argentino’” promovida por Bergoglio, hoy “Francisco”, Duhalde no solo cooptó a la CTA y la CCC que junto al Polo Obrero habían convocado la Asamblea Nacional Piquetera de La Matanza, sino también a sus agrupaciones estudiantiles, “La Corriente”–Cepa y Venceremos luego Libres del Sur.  El “diálogo” buscaba aislar al sector combativo para reprimirlo.

Este desplazamiento bloquea relativamente la “articulación” más general del movimiento estudiantil con el movimiento piquetero que peleaba para echar a Duhalde.

La UJS, que tuvo un crecimiento explosivo en todo este periodo, ocupaba la vicepresidencia de la Fuba, detrás de la corriente de los “independientes” de Iván Heyn, Recalde y Kicillof. Frente a la convocatoria al “diálogo argentino” propusieron integrarse pero logramos derrotarlos. El cuadro lo completaba el electoralismo del MST que en ese entonces ocupaba el papel actual del PTS que acaba lanzar una campaña electoral más de un año antes.  El MST le daba la espalda al movimiento piquetero como el PTS con divagues sociológicos. Como el movimiento piquetero siguió desarrollándose, el MST produjo toda una provocación para meter una cuña y evitar que el movimiento de las asambleas populares se ligue el Primero de Mayo con el movimiento piquetero ahora reagrupado en la Asamblea Nacional de Trabajadores Ocupados y desocupados (ANT).

En este cuadro, el 23 de junio de 2002 se realiza en el Gatica de Avellaneda, la segunda ANT. Como en todas, me tocó abrir el acto. La “comisión estudiantil” que pusimos en pie, participaba básicamente la UJS, la FJC del Partido Comunista ligada al MTL y la 29 de mayo ligada al PRML–Cuba y algún que otro grupo menor.

Todo esto apunta a indicar que la fracción estudiantil emblocada con la ANT era minoritaria. De los 13 centros de estudiantes de la UBA solo el CEP (centro de estudiantes de psicología) con su bandera dirigido por Hernán Scorofitz de la UJS el 26 de junio fue al Puente Uriburu. En la Fuba, solo la de avellaneda dirigida por la UJS fue al Puente Pueyrredón, el resto de la “nueva Fuba” siguió los acontecimientos por la televisión.

En la segunda ANT participaron básicamente el MIJD de Castells y el bloque piquero nacional con el Polo Obrero a la cabeza, el gran impulsor del método de las ANT. Los MTD reagrupados en la CTA Aníbal Verón con bastante peso en la zona sur y Barrios de pie no habían participado, pero con ellos se pactó la primera jornada que se resuelve en la ANT a realizar tres días después, un piquetazo que corte todos los accesos a la ciudad.

El 26 de junio

En avellaneda comienza la represión y la cacería de militantes. Balas de plomo hieren a varios compañeros. Montan un delgado cordón policial que corta el paso a la columna de masas y ahí comienza la represión de un operativo con todas las fuerzas de seguridad en el puente, todas. El comisario Fanchiotti que encabezaba el operativo en persona protagoniza el asesinato de Maxi Kosteki en la estación Avellaneda y luego de Darío Santillán que lo quiso socorrer. La caza al piquetero fue preparada por una semana de amenaza mediática de todos los funcionarios del gobierno de coalición de Duhalde y la UCR de Raúl Alfonsín.

Para justificar la represión grupos de tareas de los servicios de inteligencia encapuchados incendiaron un colectivo. El cooptado Luis D´Elía y Aníbal Fernández repiten por todos los medios que Kosteki y Santillán se habían matado entre ellos.

La masacre de Avellaneda fue planificada con antelación. Como parte del operativo, la policía había militarizado el Hospital Fiorito donde ya sabían iban a ir los heridos de bala. El asesino Fanchiotti da una conferencia de prensa en la puerta del hospital militarizado y explica lo mismo que antes habían dicho D’Elía y Aníbal Fernández. Un militante del Polo Obrero indignado le pone una espectacular piña en el ojo que disuelve la conferencia. Inmediatamente varios policías se abalanzan sobre este compañero, pero ahí Hernán Gurian en ese entonces militante de la UJS y de la Fuba de Avellaneda se lanza al rescate del compañero. Se trenza con Fanchiotti, y otros comisarios y policías. Y logra liberar al piquetero. Se retira, pero es detenido cuando vuelve a buscar su bicicleta. Hernán fue el único civil condenado por la masacre del puente Pueyrredón el 21 de septiembre del 2005, el día del estudiante, bajo el gobierno de los derechos humanos donde casualmente se destacaba por sus bravuconadas Aníbal Fernández.

En la balacera fue herido Cristian un pibe de la Interbarrial de Avellaneda (Polo Obrero), la bala le había perforado los dos pulmones, pero lo llamativo es que entraba desde arriba, es decir que había francotiradores tirando plomo desde los edificios. Al reponerse meses después se incorporó a la Fuba de Avellaneda, la sede donde el movimiento piquetero tenía más gravitación; desde “Petete” Almirón del MTR asesinado en el 2001 o luego unos años más tarde la gran escuela en la que se formó y desarrolló políticamente Mariano Ferreyra.

La mañana del 26 junio fui al Puente Uriburu; quedé del otro lado de la columna bloqueado por la policía y me fui al corte de puente la Noria, nos íbamos a reagrupar en la casa de Castells que estaba con prisión domiciliaria en Lomas de Zamora. Ahí vino Pitrola, Martino (MTR), el Beto Ibarra (MTL), Kupperman (Cuba), Bito (MTR) y Cevallos (Barrios de pie). Tuvimos una reunión breve, acordamos en la conferencia de prensa que íbamos a anunciar una marcha a Plaza de Mayo a la tarde y una gran movilización de Avellaneda a la Plaza de Mayo al día siguiente. En esa conferencia participa herido de bala en la cara el compañero Coco también del Polo Obrero y fue herida, también por plomo, en una rodilla la compañera Aurora hoy militante del Plenario de Trabajadores Jubilados en el PO.

De ahí me fui a la Facultad de Sociales Marcelo T, pasamos por los cursos en todas las facultades en las que estábamos. A la tarde una columna de 3.000 estudiantes salía de la zona Houssay, previo un recorrido dentro de la facultad de Económicas desafiando a Franja Morada. En Avenida de Mayo, nos encontramos con las columnas de psico y filo. También asambleas populares y columnas de piqueteros.

Aparecieron las fotos de Clarín que refutaban a Fanchiotti, D’Elía y Aníbal Fernández, a la mañana siguiente. Las columnas estudiantiles fueron masivas, llovía, las asambleas populares se reanimaron. Las organizaciones piqueteras produjeron una gran movilización. Más de 30 mil personas ganamos las calles. Duhalde se tuvo que ir, convocó a elecciones, anunció un millón más de planes jefes de hogar e impulsó la candidatura de Kirchner con un “nuevo relato” para desmontar la rebelión popular que había abierto el Argentinazo.

Maxi Kosteki y Darío Santillán fueron los mártires de la clase obrera que inspiró a toda la generación estudiantil que emergió con el Argentinazo. Marcados a sangre y fuego en nuestra conciencia. Un año después La Kosteki (UJS) ganaba el Nacional Buenos Aires. Con más peso en las universidades del interior o La Plata surgía la autonomista Darío Santillán. Las ocupaciones del Comahue y la Patagonia en el 2004, y la toma general de universidades de la gran huelga nacional del 2005 coreaban la consigna: “Mirá pingüino, vení y mirá: los piqueteros de la universidad”. Kosteki y Santillán estaban más que presentes.