Cultura
29/8/2024
Derrotemos en la calle el decreto que arrasa los derechos de autor e intérprete
Nuevo ataque a los artistas e intérpretes
Por el confuso decreto 765/2’24 del Ejecutivo Nacional que se publicó en el Boletín Oficial el 27/8, los autores, compositores e intérpretes de música y películas, dejaremos de percibir nuestros derechos intelectuales cuando nuestras obras se reproduzcan en ámbitos privados (por ej. Fiestas y Hoteles). Esto es lo único que está realmente claro y de lo que el secretario de turismo Daniel Scioli y ministro de desregulación Federico Sturzenegger se jactan: de “terminar con otro curro y bajar los costos a la actividad hotelera y turística”. Es decir que lograron que las cadenas hoteleras que “ofrecen habitaciones con el servicio de la música ambiental o la reproducción de películas, no le paguen derechos a sus autores e intérpretes”. Lo mismo pasaría con fiestas privadas, donde cobran los que alquilan la vajilla, los que cocinan, los que cuelgan los globos, los Dj´s que pasan la música con la que los invitados se divierten, pero NO los “creadores e intérpretes de esa música”.
Por otra parte, se habla de la obligación del pago de los derechos de autor por la reproducción en el espacio público (que incluye plataformas de internet), pero siendo los propios creadores artísticos los que deberemos autorizar dichas reproducciones y cobrar por ello no se sabe con qué método, pero sin la intermediación ni el poder coercitivo de cobro que hasta ahora tienen las Sociedades de Gestión Colectiva (Sadaic – AADI), por la Ley 17.648, que no fue derogada. Es decir, que los artistas tendríamos “la libertad de arreglarnos como podamos” perdiendo la representación que las Sociedades de Gestión Colectiva (Sadaic – AADI) ejercen cuidando nuestros derechos desde hace 88 años.
Las consecuencias de la implementación de este Decreto podrían ser:
1. La caída de la recaudación de Sadaic y AADI, lo cual significaría una transferencia de recursos de los artistas (que generan los productos culturales) en favor de la industria hotelera, salones de fiestas y plataformas de streaming.
2. El desfinanciamiento de las sociedades de gestión colectiva también traería aparejada la falta de funcionamiento administrativo, pudiendo generar cientos de despidos de sus empleados y el desmantelamiento de la Mutual (que brinda servicios de salud a los socios) y de la compensación jubilatoria simbólica (RAS – Reconocimiento Autoral Sadaic), después de los 65 años.
3. También podría ser el primer paso para legitimar la confiscación de los derechos de autor e intérprete, en favor de las grandes corporaciones en la producción de espectáculos masivos.
Claramente el gobierno de Milei sigue “ofrendando beneficios a las empresas privadas para que violen el derecho de propiedad de los creadores”. Pero, además ataca el corazón de las organizaciones colectivas, que si bien están dirigidas por una burocracia enquistada desde hace muchos años, son la herramienta adecuada para defender nuestros derechos como trabajadores de la cultura.
Esa es la “cosmovisión de este gobierno anarco-libertario”. Que cada uno cobre como pueda y que desaparezcan los sindicatos y sociedades de artistas, para facilitar una “mayor explotación de los productores de riqueza cultural”.
No es el primer intento de eximir a los hoteles del pago de derechos de autor y reproducción, pero bajo este gobierno los empresarios intentan consolidar este verdadero robo hacia nuestro derechos.
Más allá de los reclamos judiciales y acciones parlamentarias que pudieren llevarse adelante con el objeto de derogar el Decreto, consideramos que es indispensable la movilización de todos los sectores de la música y la organización “por abajo” de los compositores, autores e intérpretes para derrotar la motosierra de Milei, también en el ámbito de la cultura.