El pasado domingo, en el regreso de Jorge Lanata a la televisión en el programa Periodismo Para Todos, se dieron a conocer una serie de escuchas telefónicas e imágenes que sacaron a la luz el funcionamiento de una banda narcotraficante en Ingeniero Budge (Lomas de Zamora), con total complicidad por parte de la Policía Bonaerense. Allí se evidenciaba la relación económica que se sostenía entre los narcos del kilómetro 34 de Budge, el subteniente y otros efectivos policiales: a cambio de diez mil pesos semanales, a los narcotraficantes se les otorgaban garantías para la realización de su negocio.

 

El barrio Cuartel IX se ha convertido en el blanco de las principales denuncias de los voceros del oficialismo: los crímenes que terminaron con la vida de un niño de 3 años y otros vecinos de la zona; la detención del “Rey de La Salada” y el megaoperativo posterior contra algunos talleres, con requisas a los puesteros; el crecimiento del narcotráfico en la zona. Vidal y Cambiemos quieren hacer del feudo de Martín Insaurralde el caso testigo del legado corrupto de los Kirchner, sin que esto signifique poner en riesgo ninguno de los negocios que administra allí el crimen organizado.

 

La “coartada” del intendente Martín Insaurralde es la supuesta falta de autoridad del gobierno municipal sobre los efectivos policiales, los cuales dependen de la órbita del Ministerio de Seguridad de la Provincia. Pero el mandatario ha sido denunciado por su larga complicidad con los narcos; recientemente, luego del desarme de un grupo delictivo (el de “El lágrima”) por efecto de una denuncia de los vecinos viralizada en las redes sociales, estos aseveraron que las autoridades del municipio estaban al tanto de dicha banda “hace años”. A su turno, es conocida la proliferación de cocinas de droga en la zona de Ingeniero Budge, particularmente en el campo El Tongui, donde el Ejecutivo municipal se niega sistemáticamente a urbanizar la zona para garantizar un acceso a la vivienda para los vecinos y trabajadores. El narcotráfico subsiste en base a zonas liberadas.

 

El informe de Lanata continuaba con una entrevista al padre de Agustín, el nene de 3 años asesinado en el barrio de Villa Centenario. Con críticas parciales a la policía, los fiscales, la justicia y el poder político, Periodismo Para Todos brinda el respaldo ideológico al operativo de represión y persecución de los jóvenes y trabajadores de Lomas de Zamora y la zona sur del Conurbano bonaerense. En este cuadro de represión es que se dio la arbitraria detención de Ezequiel Marque, compañero del Polo Obrero, quien fue detenido hace pocos días luego de que su familia se negara a pagar coimas a los policías del destacamento de Villa Rita para poder transitar por el barrio sin problemas.

 

Es el contexto de las razias policiales digitadas por la gobernadora Vidal, donde los efectivos ingresan a los colectivos imponiendo requisas, cacheos y detenciones arbitrarias, agrediendo y hostilizando a los trabajadores. O del desalojo y amedrentamiento de los miles de puesteros de La Salada, que quedaron en la calle luego del nuevo desalojo del Camino de la Ribera y las calles adyacentes a las ferias.

 

Para terminar con el narcotráfico, el crimen organizado y la represión policial, así como con la complicidad de los partidos patronales, es necesario que los trabajadores nos organicemos de manera independiente por el desmantelamiento de estas redes delictivas. Es este tipo de organización el que liberó al compañero Ezequiel Marque a pocas horas de su detención.

 

Solo el Frente de Izquierda y el Partido Obrero cuentan con un programa que denuncia el entrelazamiento entre el Estado, sus fuerzas represivas y el narcotráfico y que exige la urbanización de los barrios precarios, la remoción de las cúpulas policiales, el control de los libros de guardia y cuadrículas, la elección popular de jueces y fiscales y el establecimiento de una nueva fuerza de seguridad bajo control de las organizaciones de derechos humanos y de los trabajadores.