Educación
5/6/2024
CABA: muere un trabajador en escuela primaria de Barracas
Una consecuencia de la política vaciadora del gobierno porteño.
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Los docentes exigen un plan de obras que asegure la integridad de toda persona que circule por el establecimiento.
Durante la tarde del martes 4 de junio un operario falleció aplastado por el ascensor en cuyo arreglo trabajaba, en el edificio escolar N° 28 DE 4 (“Francisco P. Moreno”) del barrio de Barracas.
La obra se realizó durante la jornada escolar, con lo cual, en horario de recreo, docentxs y estudiantxs del segundo y tercer piso del establecimiento presenciaron el hecho fatal que se cobró la vida del trabajador.
El operario, que pertenecía a una empresa tercerizada contratada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ejercía su labor junto a otro operario que, al momento del brutal hecho, fue detenido. Fuentes del establecimiento aseguran que la causa de dicha detención es por homicidio culposo. Una vez más, la desresponsabilización del gobierno se intenta hacer caer sobre los trabajadores que exponen su integridad física y psicológica cumpliendo tareas bajo la precariedad laboral como regla y con la ausencia de condiciones de seguridad y salubridad.
El gobierno es responsable
La extensa política del Gobierno de la Ciudad, comandado por Jorge Macri (PRO), de tercerización y precarización laboral implica que el mantenimiento se realice a lo largo de la jornada escolar. Esto representa un combo siniestro: no solo se expone a los operarios a trabajar sin elementos de seguridad necesarios sino también, como en el caso de la escuela 28 de Barracas, infancias y personal docente y no docente quedan desprotegidxs física y psicológicamente.
Ante el hecho se hicieron presentes en la escuela el director del Área de Primaria (entre otros funcionarios del Ministerio), y la supervisión escolar, quienes lejos de ofrecer soluciones inmediatas y reales a los problemas planteados y a la grave situación ocurrida, colocaron la responsabilidad sobre la empresa tercerizada (que contrata el gobierno que ellos representan). Pero sobre la situación edilicia no hubo un solo planteo. La preocupación por parte de los funcionarios radicó en mitigar cualquier trascendido sobre el hecho, al punto que echaron de manera patoteril al Asesor de Educación del diputado porteño Gabriel Solano (miembro vocal de la Comisión de Educación de la Legislatura Porteña), no permitiéndole el ingreso a la escuela donde docentxs y funcionarios tenían un brevísimo intercambio.
Pero la actitud de los funcionarios no puede ocultar que el desfinanciamiento educativo, la crisis de infraestructura escolar denunciada hace años por las comunidades, la falta de un presupuesto que atienda las necesidades reales de las escuelas, se hayan cobrado una vida. Días pasados, el derrumbe del techo de una escuela primaria del barrio de Devoto fue la crónica de un desenlace fatal anunciado del cual el gobierno es el primer responsable.
Lxs docentxs de la escuela emitieron un comunicado que exige el plan de obras necesario con el control de docentes, directivos y la comunidad educativa y las medidas necesarias que aseguren la integridad de toda persona que transite por la escuela.
Desde la banca del Partido Obrero-FITU se presentó un pedido de informe que sirva como punto de apoyo a la organización de la comunidad educativa y como reclamo y denuncia del hecho.
