Educación

20/2/2021

Córdoba: con un protocolo impracticable, Grahovac delega responsabilidades en la docencia

Analizamos el protocolo Covid-19 para las escuelas punto por punto.

Delegado escolar – Tribuna Docente

La cartera de Educación de la provincia a cargo de Walter Grahovac ha impuesto la implementación de un protocolo que establece las condiciones para la apertura de los centros educativos.

Desde sus primeros párrafos sentencia que “será la autoridad competente a través de las instancias administrativas que correspondan quien arbitre los medios para la implementación de las medidas de prevención necesarias, realizar las adecuaciones correspondientes y establecer el plan de mantenimiento sostenido”.  Lisa y llanamente en pocas palabras, el Ministerio de Educación (el Estado) se corre completamente de la escena y deslinda absolutamente todas las responsabilidades en los y las  docentes que desempeñan el rol de dirección de escuelas, salvaguardando así, a los funcionarios, eximiéndolos de toda responsabilidad ante cualquier consecuencia derivada de la apertura del establecimiento para el dictado de clases presenciales. Esto es solo el principio.

El protocolo se estructura en dos ejes fundamentales: el momento preparatorio y el inicio propiamente dicho. En cuanto al momento preparatorio, se refiere al acondicionamiento del edificio escolar para el retorno y el momento de reapertura, que reorganiza la vida escolar una vez se inicie el dictado de clases presenciales.

Primer Momento: preparatorio

Agua segura, higiene de manos y saneamiento básico: estos tres puntos no están garantizados en lo absoluto. No se han realizado las pruebas de laboratorio en los tanques de agua prácticamente en ninguna escuela (solo casos mínimos en las que son sede de vacunación).

No existe en ninguna escuela pública de la provincia ningún dispenser de jabón líquido (sugerido por el ausente Estado) ni de toallas de papel; mucho menos cestos en los baños, por el contrario, en la mayoría de las escuelas nos encontramos con baños inutilizables, tapados, sin puertas, literalmente en ruinas. En cuanto al saneamiento, es imposible mantener la limpieza de un edificio escolar cuando se ha redireccionado al personal a cumplimentar tareas de limpieza y no se ha reintegrado a las escuelas. Encontramos allí un enorme déficit de personal de limpieza, que está siendo explotado con paupérrimas condiciones de bioseguridad, en el sistema de salud. A esto debemos agregar los nidos de palomas que producen kilos de materia fecal, proliferación de alimañas de todo tipo, en tanto no se realizan las desinfecciones necesarias.

 

Comunicación y capacitaciones: se pretendió realizar todas las capacitaciones institucionales en tan solo dos días, lo que es completamente impracticable para cualquier docente que, debido a la terrible precarización, deben desempeñarse en cuatro o cinco establecimientos.

Segundo Momento: retorno

Este momento comprende desde la salida de la comunidad educativa de su hogar a la salida del establecimiento educativo, con todas las actividades.

Básicamente solicita a cualquier integrante de la comunidad educativa que salga de su domicilio sin síntomas y en un aparente buen estado de salud; en caso de presentar síntomas o haber sido identificado-a como contacto estrecho, deberá informarlo a la escuela y dirigirse por sus propios medios, a un centro de salud y “será requerimiento que el directivo del CE (Centro Educativo) tenga comunicación con el centro de salud y/o autoridad sanitaria…”, descargando así más responsabilidades sobre los directivos escolares.

En cuanto a los medios y formas de transporte, menciona respetar las normas del COE (Centro de Operaciones de Emergencia) y existe un protocolo para los transportes escolares; lo que el Estado no garantiza en absoluto, es la seguridad en los medios públicos, cuyas unidades van llenas por falta de frecuencia, han cambiado recorridos, acortándolos por no ser redituables para las empresas.

En cuanto al ingreso al CE, el protocolo determina que toda persona que ingrese debe estar sana. Si bien reconoce la existencia de los portadores asintomáticos, cabe destacar que son los niños y jóvenes quienes en su mayoría encuadran en esta característica, lo que nos expone al rango etario más vulnerable al contagio, de 40 a 49 años (Ministerio de Salud Nación).

De encontrarse un caso posible dentro de la institución, el protocolo prevé que esa persona sea aislada en una sala para tal fin y comunicarse con la autoridad sanitaria. Dos cosas: prácticamente en ninguna escuela sobra espacio; de hecho, espacio es lo que falta y sin un plan de infraestructura acorde a las necesidades de la educación pública.  Por lo general, los espacios están muy deteriorados, con escasa ventilación por rotura de ventanas, etc. Por otro lado, los centros de salud ya están al borde del colapso, el personal de salud no da abasto y no se cuenta con medios de transporte para casos de Covid-19.

 

 

 

El ingreso requiere además, personal capacitado para tomar la temperatura y detectar síntomas. Por la falta de personal, esa tarea recae sobre el personal de limpieza. Es muy importante destacar que la empresas de limpieza tercerizadas que contrata la provincia han redireccionado a su personal y aun no lo han reincorporado a las escuelas.

El protocolo hace mención sobre la obligatoriedad del uso del tapabocas y el distanciamiento físico no menor a 1,5m, lo que genera aún más responsabilidades al ya explotado cuerpo docente y no docente de la escuela.

Será necesario disponer de señalética (una entrega paupérrima en los kits) y sentidos únicos de circulación. En escuelas cuyos edificios en muchos casos no disponen de esta posibilidad, será imposible de garantizar.

Se estimula al lavado de manos, algunas empresas de limpieza (no todas) han colocado jabón líquido y toallas en los baños (solo de alumnado, no en los baños de docentes) pero en una inmensa cantidad de escuelas relevadas, el suministro de agua está interrumpido, es deficiente y escaso o no se han limpiado los tanques y/o cisternas, griferías y caños rotos completan un escenario que hace que estas medidas sean impracticables.

 

 

 

 

 

 

 

En cuanto a la organización áulica, se establece el uso de alcohol en gel cuya provisión no está garantizada en el tiempo; la ventilación de la misma aula, el distanciamiento entre pupitres y demás medidas, todas serán realizadas por el-la docente, quien además intentará dar su clase.

Por último se refiere al PAICor (programa alimentario cordobés) en tres modalidades: comedores, se sugiere su cierre.  Las empresas ya han redireccionado a las camareras y al personal afectado la entrega de módulos, sistema que se llevó adelante durante el 2020 con unas cajas miserables en su contenido y por último la entrega de viandas, que también fuera ensayada a principios de la cuarentena en 2020. Todas estas actividades, siempre estuvieron a cargo de personal de las escuelas, ya que una sola persona, que es el personal que envían las empresas,  no puede realizar la entrega porque se generan terribles colas para retirar los insumos, producto del gran empobrecimiento del pueblo trabajador.

 

 

Hay que organizar las escuelas y exigir las asambleas escolares y de delegado-as a Uepc . Producto de esa organización, en las escuelas donde delegado-as y comisiones de docentes realizaron relevamientos y denunciaron las condiciones deplorables y el incumplimiento del protocolo, el Ministerio tuvo que enviar cajas y cajas de elementos de bioseguridad. Eso es solo la muestra de que intentan descomprimir la realidad inocultable y que la organización rinde. En otras escuelas, los propios directivos no habilitaron la posibilidad de vuelta a clases presenciales hasta tanto no estén dadas las condiciones sanitarias. Por el camino de esta organización concreta y firme por escuela, exigimos a la conducción de Uepc asambleas para establecer un  programa y una lucha de conjunto. El próximo 24 de febrero, hemos votado una movilización hacia la casa de gobierno.  El congreso de Tribuna Docente que se desarrolla en estos momentos, fortalecerá esta lucha y la potenciará junto a la de todas las provincias. Por un plan de lucha nacional en defensa de las condiciones laborales, edilicias, sanitarias y salariales de lo-as trabajadores de la educación. El sábado 27 de febrero se llevará a cabo un Plenario educativo  provincial junto a la juventud del Polo Obrero y la UJS para reforzar un planteo de salida a la crisis educativa.