El jueves 26 de agosto docentes, familias y estudiantes de la comunidad educativa de la Secundaria 42 de City Bell se concentraron frente a la Dirección General de Educación bonaerense para reclamar la construcción de un edificio propio.

Actualmente la escuela funciona en el edificio de la Primaria 69, con cursos superpoblados y en espacios sin condiciones sanitarias ni edilicias. Desde diciembre de 2020 cuenta con un aula clausurada por el derrumbe del techo, porque lo que tienen que dar clases en los pasillos y el SUM. Tampoco los baños se encuentran en condiciones y no hay espacio para realizar Educación Física. Faltan cargos docentes, auxiliares y el hacinamiento de ambas escuelas en un sólo edificio reduce drásticamente la capacidad de matrícula impidiendo cubrir la fuerte demanda educativa en la zona que abarca a niños, niñas y jóvenes de los barrios Martín Fierro, El Rincón y otros.

Todos estos reclamos se vienen realizando desde 2013, con petitorios difundidos entre la comunidad y distintas acciones de lucha. En diciembre representantes del ministerio se comprometieron a realizar los arreglos, cubrir los cargos faltantes y comenzar las gestiones para la construcción del nuevo edificio, pero nada de esto ha sucedido. Todo esto ha sido reconocido por el inspector distrital Nelson Herrera y el director provincial de Infraestructura Martín Zabaleta en la reunión del pasado 26 de agosto, quienes se han comprometido a una nueva audiencia para el próximo 7 de septiembre para dar respuesta a los reclamos.

La excusa con la cual no se resuelve el problema de fondo, es decir la construcción del nuevo edificio, es la falta de terrenos para llevar a cabo la obra. Sin embargo esto es falso. Como venimos denunciando en Prensa Obrera, recientemente el Concejo Deliberante de La Plata votó la cesión de terrenos fiscales del barrio El Rincón al Arzobispado para la construcción de un centro religioso, financiado por el gobierno nacional, que habían sido prometidos para un centro de salud y un jardín de infantes. Como se ve, terrenos hay, pero los gobiernos provincial y municipal privilegian los intereses de la curia platense y de los especuladores inmobiliarios por sobre el derecho a la salud y la educación de la población.

La situación de la Secundaria 42 en una constante en la mayoría de las escuelas de la región. Durante todo el 2020 no se han realizado obras en las escuelas y esto tiene su correlato en la crisis de infraestructura que atraviesan las escuelas platenses. Sólo por poner los ejemplos más recientes, las familias de la Primaria 61 de la localidad de Etcheverry vienen de realizar una protesta para que se arreglen los techos derrumbados hace nueve meses, ya que tienen a la mayor parte del establecimiento inhabilitado, comprometiendo la asistencia de más de 800 niños y niñas. La Secundaria 50 de Tolosa hace un año y medio que no puede abrir sus puertas también por problemas de infraestructura.

En este contexto, la “vuelta a la presencialidad plena” anunciada por el gobernador Axel Kicillof y el Consejo Federal de Educación sin condiciones sanitarias ni edilicias no pasa de ser una ficción en medio de la campaña electoral y oculta la responsabilidad de los gobiernos nacional, provincial y municipal en el ajuste educativo que se está llevando adelante.

Frente a esta crisis educativa es necesario dar una respuesta de conjunto. La conducción Turquesa de Suteba La Plata, hoy integrada al gobierno, y el FUDB deben convocar en forma urgente a asamblea general de toda la docencia para resolver un plan de lucha unificado por todos los reclamos de las escuelas.