Marcelo D’alessandro, ministro de Seguridad de la Ciudad, firmó un convenio con el Ministerio de Educación de CABA, a cargo de Soledad Acuña, para que 150 chicos y chicas que cursan el último año del secundario en la Ciudad puedan hacer sus “prácticas educativas” en el Centro de Monitoreo Urbano de la Policía de la Ciudad, ubicado en Puerto Madero. El gobierno de Larreta, después de imponerle a los estudiantes pasantías truchas que no tienen nada de formativas, como atender en un hotel, o armar sanguches de miga, también quiere explotar a los jóvenes como mano de obra gratuita en sus dependencias.

Las pasantías se enmarcan dentro de la reforma educativa, orientada a promover una inserción precarizada de la juventud en el mercado laboral y siguiendo la línea de reformas que impulsa el Banco Mundial, la OCDE y los organismos de crédito. Conforman un fraude laboral que es aprovechado por muchas empresas, y ahora por el Estado, para incorporar mano de obra prácticamente gratuita y precarizada, por la que no tienen prácticamente costo, a cambio de “experiencia” laboral. Todo está orientado a contribuir con el ajuste fiscal que reclama el FMI y sobre el cual se alinean todos los gobiernos.

El hecho además de que estas tengan la opción de desarrollarse dentro de la institución policial también habla del adoctrinamiento que Larreta y Acuña quieren imponerle a los estudiantes, poniéndolos al servicio del accionar policial. Recordemos que los estudiantes y sus familias fueron amedrentados y perseguidos por el gobierno cuando llevaron adelante las tomas de más de 20 colegios contra estas pasantías truchas, lo que incluyó denuncias penales y recortes de salario a los docentes que se plegaran a la medida, entre otras.

Esta avanzada merece todo el repudio de centros de estudiantes, federaciones estudiantiles y sindicatos docentes. La continuidad de esta pelea es clave para la lucha educativa.