Nuevamente la dirección de la Unión de Docentes de la Provincia de Misiones (UDPM), conducida por Stella Marís Leverberg (de la agrupación ADoMis), se arrodilló a los pies del gobernador Hugo Passalacqua: aceptó una pauta salarial a la baja (23%, contra un pronóstico de inflación del 30% y una pérdida de 28 puntos el año pasado) y va a carnerear el paro del 6,7 y 8 de marzo que convoca Ctera (incluso cuando Leverberg es secretaria de Actas).

En el marco del reciente Congreso Extraordinario de UDPM el gobernador, que también es miembro de ADoMis, resaltó que hace 14 años que acuerdan paritarias sin problemas y garantizan el inicio de las clases y el “cumplimiento” del año académico. Para los docentes misioneros, eso ha representado sistemáticos acuerdos por debajo de la inflación. Hoy tenemos uno de los sueldos docentes más bajos del país, de $14.280, cuando la Canasta Básica es de $27.000.

La alianza entre UDPM y el gobierno de la Renovación también ha derivado en una destrucción consensuada del sistema educativo misionero y la estabilidad laboral docente. Una destrucción pedagógica -con programas como la secundaria 2030 y el Aula Invertida, que degradan la enseñanza por la vía de “recursos tecnológicos”- y material, con abandono edilicio, escuelas sin edificios y escuelas ranchos, instituciones vaciadas de personal al no cubrir horas y cargos vacantes, carencia de materiales pedagógicos.

La burocratización del gremio sólo ha traído penurias y miserias para los docentes. Esto ha sido posible debido a la eliminación de la participación de los trabajadores por medio de la persecución y el miedo, pero también la prebenda y el acomodo de “militantes” adomistas.

Necesitamos recuperar el gremio para los trabajadores, una tarea que empieza desde abajo, promoviendo reuniones y asambleas con los colegas, exigiendo explicaciones a los delegados escolares que aprueban cosas sin consultarnos y que sólo actúan como correa de transmisión de la burocracia. En fin, practicando la democracia sindical y poniendo nuestros intereses como obreros por delante de los acuerdos espurios de la burocracia.

Necesitamos un gremio al servicio de  los trabajadores, que enfrente el ajuste de Macri, Passalacqua y el FMI y luche por: paritarias de 30% (para recuperar lo perdido en 2018) más un 30% por la inflación prevista para 2019. Actualización automática con cláusula gatillo. Salario básico unificado nacional. Actualización del incentivo docente a $7.500 (hoy de $1.400). Por una paritaria nacional docente.

¡Abajo las reformas antieducativas! No a la secundaria 2030-Plan Maestr@, No al Aula Invertida.