Internacionales
11/6/2025
Crecen las protestas en Estados Unidos y Trump despliega miles de efectivos en Los Ángeles
Las tendencias a la rebelión popular en el corazón del capitalismo mundial.

Seguir
Las protestas.
En respuesta a las crecientes protestas en defensa de los migrantes, el gobierno deportador y racista de Donald Trump ya desplegó 700 marines y 4.000 efectivos de la Guardia Nacional –fuerza de reserva de las FF.AA– en Los Ángeles. El gobierno municipal, en manos de los demócratas, que llegaron a "criticar" la represión trumpista, decretó el toque de queda en gran parte de esa ciudad. La lucha, sin embargo, continúa.
Como parte de su intento por quebrar la movilización, Trump está reforzando la represión estatal. En un acto en la base militar de Fort Bragg, en Carolina del Norte, prometió "liberar" a Los Ángeles de una supuesta "invasión" de "enemigos extranjeros". Lo suyo, con todo, no está exento de crisis: uno de los marines se unió a una protesta en Dallas, negándose a reprimir a los movilizados. La jugada de Trump, en un cuadro de fuertes contradicciones sociales, es arriesgada, ya que puede terminar agitando aún más las aguas.
Las protestas en Estados Unidos en defensa de los migrantes se vienen multiplicando. La semana pasada, centenares de personas salieron a las calles de Los Ángeles (California), epicentro de la lucha, para rechazar las redadas migratorias, y este martes miles han hecho lo propio en Nueva York. Las manifestaciones se han extendido a otras ciudades como Atlanta, Austin y Boston.
En Nueva York, donde ya hubo otras acciones de lucha, los manifestantes marcharon ondeando banderas mexicanas, colombianas, cubanas e incluso palestinas –Trump está desarrollando una fortísima política de persecución contra el activismo que rechaza el genocidio sionista. Protestaron en el Bajo Manhattan, donde se encuentran ubicados organismos gubernamentales de inmigración. El gobierno montó un operativo represivo y habría habido al menos 20 arrestos; cientos de personas fueron detenidas en el país en el marco de las movilizaciones –solo 200 en California.
El lunes tuvo lugar una sentada en el interior del vestíbulo de la Torre Trump, en Manhattan. Allí, la policía detuvo aproximadamente a 32 personas. Por otro lado, hubo concentraciones en otros estados como Illinois, Massachusetts, Florida, Nevada, Kentucky y Texas. Las movidas, en su mayoría, se desarrollaron en las puertas de oficinas locales del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, por sus siglas en inglés) o de ayuntamientos, y algunas han llegado a reunir a miles de personas. En varias, los manifestantes fueron al choque contra las fuerzas represivas.
En Estados Unidos se está desarrollando una pueblada en defensa de los derechos democráticos y políticos de uno de los sectores más explotados y oprimidos por el capital yanqui –los migrantes acceden a los peores trabajos y a menudo son víctimas del gatillo fácil policial– y de los trabajadores en general. Se va abriendo paso contra los intentos de la burocracia de las grandes centrales obreras por evitar que haya una intervención mayor de los trabajadores.
Algunos miembros de la clique del Partido Demócrata han coqueteado con las movilizaciones y rechazado el autoritarismo trumpista, pero Eric Adams, alcalde neoyorquino del PD, viene de advertir, refiriéndose a los choques entre los trabajadores y la policía, que “no tolerará enfrentamientos y no permitirá violencia y anarquía” (¿se prepara para hacer lo mismo que su par angelina Karen Bass?); es decir, terminan haciendo causa común con Trump contra los manifestantes. Más allá de todo, los demócratas, con Biden a la cabeza como presidente, reprimieron protestas en favor de la causa palestina e impulsaron su propia y brutal campaña de deportaciones.
Las tendencias a la rebelión popular aumentan en el corazón del capitalismo mundial. Antes de las movilizaciones en defensa de los migrantes tuvieron lugar multitudinarias manifestaciones contra el gobierno. Este sábado habrá nuevas protestas, en el marco del cumpleaños del magnate. La tarea de los trabajadores es profundizar la lucha contra el facho Trump hasta derrotarlo.

