Un total de once ministros y quince diputados israelíes participaron este domingo 28 en Jerusalén de un acto convocado por organizaciones de colonos (Nachala y el Consejo Regional de Samaria en Cisjordania) para reclamar el desplazamiento de los palestinos de Gaza y la reconstitución de los asentamientos en el enclave costero, que fueron clausurados tras la retirada israelí de 2005.

El mitin fue expresivo del profundo desprecio y odio que anida en estos sectores hacia el pueblo palestino. Algunos de los oradores plantearon “fomentar” una emigración “voluntaria”, pero otros fueron aún más lejos. Según la crónica del Times Of Israel, Shlomo Kari, ministro de comunicaciones y miembro del Likud, sostuvo que, dado el cuadro de “guerra” actual, ese desplazamiento podría incluso ser forzado.  Uno de los carteles del acto, en la misma sintonía, expresaba: “Solo un traslado traerá la paz”. Por su parte, Bezalel Smotrich, ministro de finanzas y miembro del Partido Sionista Religioso, balanceó como un error la retirada israelí de 2005, puesto que habría entregado la región al “terrorismo”. También estuvo presente Itamar Ben Gvir, ministro de seguridad y miembro de Poder Judío, otro de los partidos que integra la alianza oficialista, quien supo justificar el bloqueo a Gaza en nombre de que “estamos tratando con animales”, y que, además, entrega armamento en forma sistemática a los colonos.

Nachala, animador de la jornada, elaboró un mapa con los puntos en que deberían reconstruirse los asentamientos, incluyendo las ciudades de Khan Yunis (donde se concentra en estos momentos la ofensiva israelí) y Gaza, devastada por los bombardeos. Daniella Weiss, la dirigente del conglomerado, desdramatizó: “millones de refugiados de guerra van de un país a otro en todo el mundo”, y se preguntó, entonces, por qué “sólo los monstruos que crecieron en Gaza y convirtieron esta hermosa parte de la tierra en una tierra fantasma, ¿sólo ellos deberían estar conectados a ella? ¿Ellos, específicamente, no pueden moverse de una tierra que convirtieron en un infierno y desde donde amenazan con destruir a Israel? Solo el pueblo de Israel colonizará toda la Franja de Gaza y gobernará toda la Franja de Gaza (ídem). En pocas palabras, un planteo de limpieza étnica.

Ya nadie puede decir, a la luz de la cantidad de ministros y diputados presentes, que se trata de un sector políticamente marginal. Y, aunque el primer ministro Benjamin Netanyahu se desmarcó de la convocatoria, en particular del planteo de crear nuevos asentamientos, encabeza un gobierno de “unidad nacional” que lleva a cabo una operación de características genocidas que tiene entre sus objetivos militares las escuelas, centros de refugiados y hospitales, y que desplazó al 80% de los habitantes de sus hogares.

En los hechos, la brutalidad de la operación israelí y un bloqueo que ahoga humanitariamente al enclave propician las condiciones de una expulsión gigantesca de la población fuera de Gaza, algo que ha sido advertido por Egipto y Jordania, los dos países que se verían más afectados por una diáspora. Ante la desestabilización regional que esto supone, Estados Unidos, que apoya activamente la invasión, propone que la Autoridad Palestina se haga cargo administrativamente de la región, en caso de una derrota de Hamas.

Provisoriamente, las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) están arrasando zonas fronterizas enteras (edificios, zonas agrícolas) para crear una vasta “zona de seguridad” que separe aún más a gazatíes e israelíes. De hecho, se presume que los 21 soldados que murieron durante el día más fatídico de operaciones para las tropas sionistas, fallecieron mientras realizaban una de estas tareas de demolición (La Nación, 26/1).

Frente a las operaciones israelíes, que ya dejaron más de 26 mil muertos, insistimos: abajo el genocidio. Fuera las tropas israelíes de Gaza. Por una Palestina única, laica y socialista.

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