LGBTI

20/1/2022

Repudiamos el ataque de odio hacia el bar “Maricafé” 

La violencia hacia la población LGBT no se toma vacaciones.

El sábado pasado, en horas de la madrugada, se suscitó un intento de incendio en un bar ubicado en la calle Honduras del barrio de Palermo. Punto de encuentro para la comunidad LGBTI+ en busca de espacios respetuosos de las identidades y sexualidades diversas. El hecho ocurrió cerca de las 5 AM. Aunque no se registraron pérdidas materiales, este ataque es ilustrativo de la violencia a la que se ve sometido el conjunto del colectivo de la diversidad sexual.

El ataque al Maricafé, ocurrido en el centro de una de las áreas comerciales más importantes de la ciudad “Gay Friendly” de Larreta, es otra de las muchas violencias que tienen como blanco específico a las identidades y sexualidades diversas, un sector poblacional relegado y sometido a las peores condiciones de vida. Es importante destacar que en muchos bares y boliches se impide ingresar a personas del colectivo debido a la simple razón de su expresión o identidad de género, es por eso que se termina recurriendo a establecimientos que se reclaman propios de la comunidad.

El “Orgullo BA” cae por su propio peso

El gobierno de la ciudad poco y nada hace para frenar la violencia hacia las personas LGBTI. No brinda ninguna solución a las urgentes demandas del movimiento, como podría ser la puesta en marcha la ley 4376 “Política Pública para el reconocimiento y ejercicio pleno de la ciudadanía de las personas Lesbianas, Gays, Trans, Bisexuales e Intersexuales” (Aprobada hace casi diez años) donde se establece que un 5% de la planta de la ciudad sea destinada a personas trans. Según los últimos datos publicados por el mismo gobierno, de 700 aspirantes, solo accedieron 100 y nada se especifica sobre sus contrataciones.

A pesar del intento del Jefe de Gobierno para pintarse de colores, no se puede barrer todo debajo de la alfombra. Su pata represiva, la Policía de la Ciudad, y la Justicia de la ciudad también operan en la criminalización de las identidades y sexualidades diversas. Caso testigo de esta persecución es el de Marian Gómez, absuelte gracias a la lucha luego de muchas instancias donde el mismo Estado intentó regimentar las corporalidad y sexualidades que se hallan fuera de la heteronorma capitalista.

Los ataques de odio hacia las personas LGBTI son la norma, desde la Agrupación LGBTI 1969 repudiamos el incendio intencional al bar Maricafé y llamamos a seguir la lucha, organizades en las calles para terminar con la violencia hacia las diversidades sexuales y de género.