A 45 años del golpe genocida, multitudinaria movilización a Plaza de Mayo

Junto al Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. 30.000 compañeros desaparecidos presentes, contra la impunidad de ayer y hoy.

Foto: Andrés Ojo

A 45 años del golpe genocida, movilizamos junto al Encuentro Memoria, Verdad y Justicia a Plaza de Mayo y en todo el país. Al frente de la movilización multitudinaria estuvieron los organismos independientes de Derechos Humanos (la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, Apel, el Encuentro Militante Cachito Fukman, la Correpi, el Ceprodh y el Cadhu, entre otros, así como también Sergio Maldonado). También participaron el Polo Obrero y sindicatos como la AGD-UBA, el Sutna, Suteba La Matanza, Suteba Tigre, Ademys y la Cicop. Estuvieron presentes los despedidos de Just (que realizan un acampe frente a la planta de Lomas del Mirador), trabajadores de la clínica San Andrés de Tres de Febrero (en lucha por su reapertura), del Hospital Garrahan y tercerizados ferroviarios, entre muchos otros. Hubo una columna de compañeras y compañeros de las comunidades boliviana, paraguaya y peruana, con banderas que decían “vivan las rebeliones populares. Por la unidad socialista de América Latina” y “Fuera Marito [por el presidente Mario Abdo Benítez]. Viva la rebelión en Paraguay”. Los partidos y referentes del Frente de Izquierda – Unidad fueron también parte de la jornada.

En oposición a  los organismos ligados al gobierno del Frente de Todos de Alberto Fernández y Cristina de Kirchner y de la CGT y CTA, que definieron desmovilizar, hoy más que nunca rendimos homenaje a las y los 30 mil desaparecidos por la dictadura genocida y estamos de pie y en lucha contra la impunidad de ayer y de hoy.

La multitudinaria movilización denunció al pacto del gobierno con el FMI. El gobierno de Fernández se dispone a seguir pagando miles de millones de dólares, hipotecando aún más a la Argentina, a un organismo financiero internacional que estuvo detrás del golpe de 1976 y en los planes de ajuste capitalista de todos los gobiernos. Hoy mismo el ministro Martín Guzmán se reunía en Washington con el FMI: una verdadera ofensa a la lucha por los derechos humanos.

En las vísperas de este nuevo aniversario del golpe del ‘76 en la Argentina vimos cómo el gobernador formoseño Gildo Insfrán desató una fuerte represión contra una protesta ante su nuevo intento de montar un virtual estado de sitio en la provincia con la excusa de la pandemia. En Formosa se venía denunciando la existencia de centros de “atención” donde el gobierno encerraba a contagiados y sospechosos por tiempo indeterminado. Pocos días después, el gobierno de Alberto y Cristina Fernández respaldó abiertamente a Insfrán y lo invitó a participar en el acto oficial “contra la violencia hacia la mujer”. El gobierno “nacional y popular” ha optado nuevamente por defender a los represores y ajustadores en “democracia”.

Esto no podía ser de otra manera. En la provincia de Buenos Aires, donde gobierna el delfín cristinista Axel Kicillof, su secretario de Seguridad, Sergio Berni, ha encabezado la represión, arrancando con los obreros del frigorífico Penta, luego con miles de familias que luchan por vivienda digna como en Guernica, en el marco de una situación desesperante que recorre toda la provincia. Este último es el principal encubridor de todas las tropelías de la maldita policía bonaerense, incluida la desaparición y muerte de Facundo Astudillo Castro y las decenas de casos de gatillo fácil, violencia contra la mujer y el asesinato de Úrsula Bahillo a manos de un miembro de la policía. Berni pretende además bajar la edad de imputabilidad y criminalizar a los niños, al igual que Patricia Bullrich. Por su parte, para llevar adelante la represión, el gobierno de Fernández y Kicillof cedieron a todos los reclamos del motín policial.

La oposición patronal derechista de Juntos por el Cambio busca sacar su tajada de las represiones, el ajuste o casos de corrupción de los gobiernos del Frente de Todos. Pero además de las represiones, muertes, tarifazos y corrupción bajo el anterior gobierno, en Jujuy hoy crece la represión contra los sectores populares en lucha y contra los propios legisladores del Frente de Izquierda que reclaman la asunción de Gastón Remy para ocupar su banca como parte de los acuerdos de rotación de nuestro Frente -algo que impiden tanto la UCR como el PJ-, a los que el gobierno de Gerardo Morales inició causas judiciales.

Para reprimir a los trabajadores no hay disputas entre el gobierno y la derecha macrista. Ambos cuentan en sus filas con los Bullrich o los Berni. Este 24 de marzo honramos la memoria de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, de Facundo Astudillo Castro, de Úrsula Bahillo y todos y todas los desaparecidos/as y asesinados durante los gobiernos constitucionales.

La mayor parte de la cúpula de la Iglesia Católica fue abiertamente cómplice y partícipe del genocidio. Hoy esa misma Iglesia utiliza el poder y los subsidios que les confieren los gobiernos para seguir con su campaña oscurantista contra el derecho de las mujeres y su lucha, que lograron arrancar la ley de aborto, y para integrar el Consejo Económico y Social en favor del gobierno y las patronales. Entre otros reclamos, hoy marchamos junto al movimiento de lucha de las mujeres y disidencias por la inmediata separación de la Iglesia y el Estado y la anulación de todos sus subsidios.

Hoy la movilización en Plaza de Mayo y todo el país también moviliza por el fin de la persecución a todos los luchadores. Exigimos la absolución inmediata de César Arakaki y Daniel Ruiz, quienes se movilizaron contra la reforma previsional de Macri y fueron llevados a juicio luego de la brutal represión del 14 y 18 de diciembre de 2017. Exigimos la absolución y la libertad de Sebastián Romero, junto con el cese inmediato de las causas judiciales a todos los perseguidos por luchar. Exigimos la nulidad de la causa que lleva a juicio a 27 estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba por luchar por la educación pública. Exigimos el cese de persecuciones a los legisladores del FIT en Jujuy. El macrismo, que ahora hace demagogia frente a la represión en Formosa, no dudó en reprimir brutalmente a miles de trabajadores movilizados contra su plan de reformas antiobreras y el robo a los jubilados como en diciembre de 2017.