Luego de que el diputado oficialista Carlos Gómez acusara en la última sesión al activismo ambiental de utilizar “métodos de la dictadura para frenar inversiones”, el gobierno de Mariano Arcioni -decidido a avanzar en  recurrió a grupos de choque a través de patotas de la burocracia sindical adepta de Aoma (Asociación Obrera Minera Argentina).

Por la noche del martes 8 el activismo ambiental de Chubut salió rápidamente a repudiar el apriete que recibieron las diputadas Leyla Lloyd Jones y Florencia Papaiani, quienes denuncian que grupos promineros identificados como parte del sindicato de Aoma se ubicaron en las puertas de sus casas en actitud amenazante para que voten a favor de la zonificación minera, que en el día de hoy puede recibir dictamen en comisión y ser llevado a sesión mañana para su tratamiento.

No es un hecho aislado. Se encuadra en una serie de acciones que muestran que el avance megaminero, contra la voluntad popular, se sirve de las fuerzas de seguridad, la burocracia sindical y los medios patronales de comunicación. Sin ir más lejos, hace unos días el ministro de Seguridad Federico Massoni declaró que no permitiría que activistas ambientales “sigan amenazando” a los diputados que votan a favor de la zonificación, reivindicando así su accionar represivo y anticipando la posibilidad de volver a realizar allanamientos en casas de activistas.

El lobby minero, el Estado, la burocracia sindical funcionan como una tríada en función del avance extractivista, atacando el movimiento ambiental. Mientras las conducciones de sindicatos como la Uocra, Aoma o Luz y Fuerza, mueven todo su aparato en pos de defender la zonificación y enfrentan (de forma violenta) al movimiento ambiental, las conducciones sindicales que levantan la consigna “No es no” y se dicen a favor de la Iniciativa Popular se muestran vacilantes. Convocan a acciones de lucha aisladas, o a paros vacíos sin preparación, y no ponen todos los recursos a disposición de la movilización para derrotar la zonificación.

Son días decisivos en la lucha contra la megaminería en la provincia. Mientras el proyecto de la Iniciativa Popular 2020 es demorado en dos comisiones, la zonificación minera pretende ser sancionada en la última sesión ordinaria del año del jueves 10. El movimiento ambiental chubutense redobla los esfuerzos con la fortaleza de las multitudinarias movilizaciones y de las más de 30.000 firmas por la IP2020, y prepara dos días intensos con movilizaciones a Rawson, cortes de ruta y manifestaciones locales.

Desde el Partido Obrero nos unimos a las acciones impulsadas por las asambleas, llamamos a que toda la población a salir a las calles por un nuevo chubutazo en defensa del agua, de nuestro territorio y por todas las reivindicaciones postergadas de las y los trabajadores. Más que nunca, el “¡No es No!” lo conquistamos en las calles. Basta de aprietes, amenazas y persecución a los luchadores.

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