El segundo juicio de la ‘megacausa’ Esma tendrá en el banquillo a 68 genocidas, que serán juzgados por 800 casos de desaparecidos y supervivientes en la Escuela de Mecánica de la Armada.

De los imputados, cincuenta serán juzgados por primera vez -entre ellos, seis pilotos que conducían los vuelos de la muerte; además, quince llegan al juicio en libertad y veintisiete con arresto domiciliario. La mayoría de estos represores no conocerá nunca la prisión efectiva: son octogenarios, que morirán impunes o detenidos en sus casas y countrys.

Cuatro de estos represores se encuentran prófugos. Uno de ellos es Mario Alberto Sandoval, quien después de la dictadura trabajó para los servicios de inteligencia franceses y fue asesor del Nicolás Sarkozy. Sandoval es todavía un protegido del gobierno galo, que pone todas las trabas burocráticas para impedir su extradición.

Apenas dieciséis de los acusados en este juicio se encuentran purgando condenas por delitos de lesa humanidad. Es el caso de Alfredo Astiz, el Tigre Acosta y Antonio Pernías, juzgados en la anterior causa Esma.

Por otro lado, será juzgado por primera vez Juan Alemann, ex secretario de Hacienda de Martínez de Hoz y representante de la banca suiza en Argentina. Alemann está acusado como co-autor de tormentos en la Esma, por un caso.

Apel, como parte del colectivo Justicia Ya!, forma parte de la querella e intervendrá en el juicio aportando sus abogados. La primera medida que solicitamos fue la revocación de las prisiones domiciliarias, una prerrogativa que no está contemplada ni jurídica ni jurisprudencialmente para aquellos que cometieran crímenes aberrantes durante el genocidio dictatorial.

Exigimos justicia para todos los desaparecidos y detenidos en todos los campos de concentración y exterminio.