Gustavo Béliz y su plan para censurar contenidos en las redes sociales

Mediante una selección arbitraria de ciertos contenidos que "intoxican el espíritu de la democracia".

Gustavo Béliz - secretario de Asuntos Estratégicos

Durante la presentación de la Agenda Productiva Federal, el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, adelantó que desde el Consejo Económico y Social se trabaja, junto a 40 universidades, en “un estudio pionero” sobre las redes sociales a través del que se buscará proponer “un pacto para su buen uso” para que “dejen de intoxicar el espíritu de nuestra democracia”. El gobierno busca censurar la libertad de expresión en las redes sociales mediante una selección arbitraria de ciertos materiales que serán catalogados como “dañinos” o “tóxicos”.

La presentación del plan generó una gran controversia, a lo que Béliz tuvo que salir a aclarar que “no significa ni un intento de regular las redes sociales, ni un intento de vulnerar la libertad de expresión, ni mucho menos avasallar ningún derecho constitucional”. El recule recuerda a lo hecho por la exministra Sabina Frederic, que en 2020 había lanzado el cyberpatrullaje para “testear el humor social” en plena cuarentena.

Las redes sociales son una expresión del termómetro social. Allí se instalan masivamente reclamos de la población, se viralizan denuncias y se difunden acciones, además de debates e incluso, desde ya, todo tipo de ataques. La caída en picada de la imagen del gobierno y el descontento generalizado con la situación, producto de las políticas de ajuste que golpean las condiciones de vida de la población, tiene su manifestación en las redes.

La selección de contenido “nocivo” que se propone estaría a cargo del Estado, quien define a su vez qué es la democracia y en nombre de ella persigue y reprime la protesta social. Es lo que pasó, por ejemplo, con la movilización al Congreso durante la votación en Diputados del pacto con el FMI, tras la cual el gobierno desplegó una persecución política con detenciones e incluso retiró los programas sociales a los manifestantes antes de corroborar siquiera su culpabilidad en el delito que se los acusa. ¿El proyecto de Béliz busca censurar de las redes sociales todas las luchas que se vienen contra el ajuste pactado con el FMI?

La libertad de expresión es un derecho que ha sido vulnerado sistemáticamente por parte de los Estados, muchas veces como ahora, en nombre de proteger la democracia. Es además un derecho siempre cuestionado por la propiedad capitalista de los medios de comunicación, algo que justamente las redes sociales han venido a relativizar. Sin ir más lejos el programa “Redes para el bien común” del Consejo Económico y Social fue adoptado por “sugerencia” de las Naciones Unidas, es decir que forma parte de las políticas del imperialismo (proyectos similares se anunciaron en Francia y Alemania).

El día anterior a la reunión del Consejo hubo una reunión clandestina entre el gobierno, la UIA y la burocracia sindical de la CGT para pactar topes a la paritarias en medio de una inflación explosiva y reformas de los convenios colectivos de trabajo. Mientras atacan nuestras condiciones de vida con acuerdos de espaldas a la población, quieren que esta no delibere ni se exprese por redes sociales.

El control de las redes sociales por parte del Estado sería una herramienta de la censura, la regimentación y persecución de la población trabajadora. Rechazamos este plan del gobierno.

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