Se detuvieron en las últimas horas a cinco policías de la comisaría 45 de Cipolletti, acusados de torturar hasta la muerte a Jorge Gatica, de 36 años. La audiencia donde se manifestaron las acusaciones arrojaron que la causa está caratulada como “tortura seguida de muerte”. El fiscal Juan Pablo Escalada durante la audiencia describió la acusación. Aseguró que hay testimonios de testigos, filmaciones e informes médicos que prueban que la víctima no tenía lesiones graves cuando fue detenido. Un par de horas más tarde fue trasladado sin vida al hospital local, ubicado a pocas cuadras.

El hecho comenzó a ser investigado en la madrugada del martes. El Ministerio Público Fiscal fue notificado del fallecimiento del hombre en una dependencia policial y ese mismo día se realizó una inspección ocular dentro de la seccional. De ella participó la unidad operativa para la investigación fiscal de Cipolletti, perteneciente al Ministerio Público.

Luego, “se ordenó el traslado del cuerpo de Gatica a la ciudad judicial de General Roca para que el Cuerpo de Investigación Forense realizará el miércoles la correspondiente autopsia, cuyos resultados preliminares fueron recibidos ayer” (Télam).

El cuerpo forense terminó por determinar que Gatica murió por hemorragia hepática interna provocada por múltiples fracturas costales.

“Se recibieron diversas declaraciones testimoniales y se recopilaron los videos de cámaras de seguridad ubicadas en cercanías a la comisaría y en otros sitios donde Gatica habría circulado horas antes de su muerte” (Télam).

Desde allí que se desprenda que antes de ingresar a la comisaría el día lunes alrededor de las 22:30 Gatica estaba solo con golpes leves. A las 00:30 llegó muerto al hospital de Cipolletti, a donde fue llevado por los mismos policías que lo acababan de asesinar. Es decir, llevarlo al nosocomio solo tuvo la intención de tapar el modus operandi que se repite sistemáticamente en todo el país y esta provincia, es decir, los abusos policiales que matan a jóvenes mediante torturas o el “Gatillo Fácil” y los desaparecen.

Gabriel Musa, precandidato a gobernador, entrevistado por diferentes medios de la provincia denunció que “no es otro caso aislado”, y agregó:

“En verdad estamos frente a una provincia donde impera la protección política a policías asesinos y la impunidad, como ocurre con los siete condenados a perpetua por el asesinato y desaparición del joven trabajador rural Daniel Solano (27). En el caso Otoño Uriarte varios audios demuestran cómo el aparato policial está relacionado con la trata de mujeres para explotarlas sexualmente en burdeles clandestinos”.

“Exigimos el esclarecimiento del caso inmediatamente, juicio y castigo, pero también cárcel común. El aparato represivo del Estado debe desmantelarse, porque asesinan, torturan, desaparecen junto con la complicidad de quienes gobiernan a favor de grandes pulpos capitalistas, de quienes tratan personas para explotarlas, laboralmente o sexualmente”, concluyó el precandidato a gobernador por el Partido Obrero.

Los jueces definieron la prisión preventiva de cuatro meses, para tres en sus domicilios y para dos en calabozos. Es que “dos de los acusados apuntaron a uno de sus compañeros. Se trata de los oficiales Henríquez y Carrizo, mientras que un tercero, Moraga, dijo no haber visto al detenido. Los dos restantes, Quintrel y Sosa, este último apuntado por sus colegas, se negaron a declarar” (diarioneuquén.com).

De seguirse la postura de los detenidos, y las acusaciones entrecruzadas, surge que podría diferenciarse la responsabilidad respecto de los roles, y por lo tanto las condenas que puedan corresponderles; hoy a todos les tocaría prisión perpetua.

Desde el Partido Obrero denunciamos que la posición de la defensa tiene como objetivo mostrar que es un caso aislado, y que “a un loquito” se le fue la mano, y por lo tanto la rechazamos. Es más, deben abrirse los libros de la comisaría para saber quiénes y cómo actuaron, más allá de los cinco policías detenidos porque en definitiva es la policía que el gobierno de Arabela Carreras y compañía promueven.

Justicia por Jorge Gatica. Basta de abusos policiales. El Estado y el poder político son responsables.