Cortes y piquetes en todo el país contra el ajuste de Milei

A pesar de la represión policial persiste el reclamo contra el desabastecimiento de los comedores populares y contra los despidos y el crecimiento de la pobreza y la indigencia.

Foto: Federico Imas @ojoobrerofotografía.

Las organizaciones piqueteras y sociales realizaron este lunes 18 una jornada de cortes en los accesos a CABA y diversos puntos del país, en reclamo contra la política criminal del gobierno que hace tres meses que no envía comida a los comedores populares, en medio de un agravamiento de la crisis económica y social, como resultado de la profundización de las medidas de ajuste.

La jornada contó con más de 500 cortes en todo el país, en un marco de acción común entre las organizaciones de la Unidad Piquetera y la Utep. El movimiento de trabajadores precarizados y desocupados busca dar una respuesta colectiva a la ofensiva de Milei y los “liberales”, quienes están arrojando a millones de trabajadores a la pobreza y la indigencia.

En Puente Saavedra, la Policía de la Ciudad avanzó reprimiendo violentamente sobre los manifestantes violando la jurisdicción de la provincia de Buenos Aires. Poco minutos después, coordinadamente, las fuerzas federales reprimieron contra los manifestantes en el Puente Pueyrredón, también violando la normativa vigente y la jurisdicción de la provincia. Independientemente de la represión policial, la manifestación continúa en todos los puntos convocados.

Desde las organizaciones piqueteras denuncian que el gobierno cortó la provisión de alimentos a más de 45 mil comedores populares que funcionan en todo el país, al que acuden las familias trabajadoras y pobres que no llegan a fin de mes.

Este ajuste brutal contra los trabajadores se da en el marco de una disparada de los precios de los alimentos, con el salario mínimo en apenas $202.000 de extrema indigencia y un economía totalmente en recesión, con despidos en el sector privados y miles de recortes, cesantías y despidos entre los trabajadores del Estado.

El recorte de las partidas de alimentos para los comedores es implementado en nombre de un ataque a los “intermediarios” -cabe recordar que la ministra Sandra Pettovello se negó a asistir a  las familias que se acercaron a su despacho, como ella había solicitado- y un “ahorro fiscal” para garantizar el pago de la deuda externa y los negocios capitalistas.

Los comedores populares funcionan con el esfuerzo de miles de trabajadoras y trabajadores que asiste a las familias necesitadas de los barrios, combatiendo la pobreza generada por las políticas de ajuste, como le devaluación, los despidos, la inflación y la confiscación de jubilados y trabajadores. Una labor de emergencia que el Estado no realiza y que tampoco garantiza de forma “directa” a las familias necesitadas.

La acción de este lunes 18 había sido convocada para el martes 12, pero tuvo que ser postergada por el temporal que, junto con la desinversión en obras públicas e hídricas, arrasó con las viviendas de miles de vecinos y vecinas del Amba, inundando las casas y anegando las calles y accesos principales de circulación.

Desde el Polo Obrero fueron enfáticos en señalar que el gobierno nacional es el que está liquidando las cooperativas de trabajo encargadas de la limpieza de calles, desagües y sumideros, que garantiza la no obstrucción de los desagotes impidiendo la inundación de los barrios. El ajuste sobre los trabajadores trae consecuencias de todo tipo: inundaciones, pérdidas materiales de los trabajadores, riegos en la salud y la vida de las personas, hambre, desocupación, miseria, etc.

En CABA y los alrededores se realizaron cortes en los accesos a la Ciudad de Buenos Aires, mientras que en las provincias fueron convocadas acciones en rutas y puntos neurálgicos, para hacer oír el reclamo de los trabajadores precarizados y desocupados de todo el país.