Durante la noche del 9 de noviembre, sin la orden de un juez y con un enorme despliegue, la policía bonaerense, al mando de Sergio Berni, y la gendarmería, ingresaron otra vez al barrio Vernazza, ubicado en la localidad de Virrey del Pino. Esta vez para desalojar a un grupo de familias que se encontraban en un predio cercano a la Ruta Nacional Nº3 a la altura del kilómetro 41. Un vecino del lugar aseguró que “la gente del barrio Vernazza se fue pacíficamente de la toma cuando la policía comenzó con el operativo” (Clarín, 10/11).

Este nuevo desalojo en Virrey del Pino ocurrió en el barrio de Esteban Bellido, un trabajador de 39 años asesinado por la espalda al ser “confundido” con un dealer en un operativo de la bonaerense, hace apenas 10 días. Los vecinos ayer desalojados, volvieron hoy por la mañana al predio para denunciar el accionar de la policía y sumaron el pedido de justicia por Bellido. La profundización de la pobreza, como resultado de las políticas de ajuste de un gobierno totalmente sometido al FMI, convierte a los barrios en terreno fértil para el crecimiento del narcotráfico y ocurre que, cuando se despliega un operativo antidroga para “combatirlo”, las fuerzas de inseguridad terminan llevándose puesta la vida de un trabajador. Sin embargo a la hora de ejecutar brutales desalojos que implican la quema de casillas, merenderos y pertenencias de familias que reclaman un techo para vivir no existen “confusiones” y queda claro a quiénes quieren atacar y “combatir”.

Este tipo de operativos ilegales forman parte de una orientación política del peronismo que recorre toda la Provincia de Buenos Aires en torno a la problemática de la falta de acceso a la vivienda que afecta a miles de familias. En La Matanza se ha expresado en brutales desalojos sistemáticos en distintas tomas, hasta la detención de un trabajador a través de una causa armada. El caso de Rafael Crispín, liberado al calor de históricos piquetes en el distrito, quien se encontraba junto a cientos de familias en el Barrio La Nueva Unión, resume esa orientación por parte del PJ local. A 28 meses del asesinato de Lucas Verón y a 10 días del caso de Esteban Bellido repudiamos el accionar de la policía bonaerense que actúa con aval político de Sergio Berni y Axel Kicillof.

¡Fuera la policía de nuestros barrios! ¡Tierra para vivir! ¡Fuera Berni!