Mujer

18/10/2024

37° ENM

Organizadas y en las calles: ¡Fuera Milei!

Nuestra intervención en el 37 Encuentro Plurinacional de Mujeres y Diversidades.

El PDT en el ENM 37.

El pasado fin de semana miles de mujeres y diversidades copamos la ciudad de San Salvador de Jujuy para participar del 37° Encuentro Plurinacional de Mujeres y Diversidades. Tras meses de múltiples esfuerzos para juntar la plata para viajar, y en el medio de importantes luchas, las compañeras del Plenario de Trabajadoras (PDT, organización de mujeres del Partido Obrero) nos hicimos presentes con una importante delegación a nivel nacional. Queda claro que más allá del intento, por parte de la comisión organizadora integrada mayormente por el PCR y el PJ, de hacer pasar desapercibido el encuentro, un sector del movimiento persiste en impulsar la lucha para enfrentar a un gobierno que se ha declarado como acérrimo enemigo de las trabajadoras mujeres y diversidades.

En Jujuy fuimos recibidas por las estudiantes y docentes universitarias, protagonistas de las tomas de algunas facultades en la UNJU que mostraron la vigorosidad de la lucha educativa a nivel nacional que hoy funciona como el canal de reagrupamiento mayoritario de oposición al gobierno. Los talleres de educación tuvieron una participación extraordinaria dado el proceso abierto a nivel nacional. Allí desarrollamos una intervención buscando desenvolver la lucha universitaria como el plafón que permita unir a todos los sectores como salud, los piqueteros, jubilados y trabajadores sin ningún tipo de confianza en las burocracias sindicales (docente, estudiantil, etc.) y en los rectorados, que han sido los grandes claudicadores de una lucha que comenzó a principio de este año pero que, incluso a pesar de ellos, se ha podido radicalizar con la toma de casi 100 facultades consagrándose como un real estudiantazo contra Milei.

También nos recibieron las compañeras jujeñas y las maloneras, grandes protagonistas de la rebelión popular del año pasado que se puso en pie de guerra contra el ataque que planteó la reforma constitucional de Morales. Las comisiones de lucha contra el extractivismo y en defensa de los territorios, de las cuales participamos, encarnaron estas luchas ya que estuvieron marcados por la denuncia no solo al Rigi sino a todos los regímenes provinciales que benefician a los lobistas del saqueo de los recursos naturales sin importar las condiciones de vida de los pobladores como sucede con la llegada de Mekorot. Los incendios en la provincia de Córdoba son la muestra más reciente de cómo la depredación afecta las condiciones climáticas dejando al desamparo a los trabajadores de la zona.

El contingente con el que fuimos a Jujuy estuvo compuesto también por varias compañeras criminalizadas por la política represiva de Milei y Bullrich. Piqueteras y referentes de lucha se hicieron presentes en los talleres donde consiguieron el apoyo de todas las participantes; además, en toda la ciudad, con mesas de agitación y juntadas de firmas, logramos dotar de un manto de solidaridad a la causa judicial armada contra nuestra organización. También activamos en defensa de nuestra compañera diputada Vanina Biasi, hoy perseguida y atacada por defender al pueblo palestino contra el Estado genocida de Israel. El primer día del encuentro culminó con una radio abierta contra la persecución política y la represión, donde hablaron compañeras también de otras organizaciones piqueteras; además de luchadoras como Carolina Abregú, activista perseguida por luchar, hermana de una mujer sobreviviente de un intento de femicidio; y Cami, que estuvo presa tras las salvajes jornadas de represión del 12 de junio, día de tratamiento de la Ley Bases.

Los talleres de violencia y femicidios tuvieron la presencia de las compañeras y amigas de Claudia Tupe del Polo Obrero para plantear la feroz lucha que encaramos para conseguir justicia por su femicidio. En ese debate, marcamos la responsabilidad absoluta del Estado en todos los casos de violencia hacia las mujeres y diversidades mientras que buscamos poner en discusión un balance que dé cuenta que con la política del gobierno anterior, de llenar de supuestas feministas el Estado, incluso otorgándoles un ministerio, no se combatió la violencia de género; al revés, el gobierno de los Fernández empobreció aún más a las mujeres y la violencia persitió. Necesitamos organismos autónomos dirigidos por las propias trabajadoras para combatirla.

En los talleres de organización sindical participamos también con compañeras estatales, trabajadoras de la salud, gráficas, de casas particulares, jubiladas, entre muchas otras, para dar una fuerte pelea contra las burocracias sindicales que dejaron pasar todos los ataques, incluida la Ley Bases que es toda una victoria para las patronales. Mientras en los talleres había una amplía mayoría que se pronunciaba por el paro general, las representantes de la burocracia llegaron, con un alto grado de cinismo, al punto de justificar la falta de paros como método de lucha diciendo que “perjudicaría a las trabajadoras informales”. Una estafa de características mayúsculas, buscaron justificar la inacción de las direcciones sindicales que nada tiene que ver con la defensa de los sectores más precarizados que se multiplican cada día.

La participación de distintos sectores del activismo y sectores de izquierda, además de peronistas e incluso de la burocracia sindical, permitió procesar debates de importancia crucial para el momento.  Desde el PDT fuimos con una tarea clara: impulsar en todos lados la necesidad de organizarnos para echar a Milei; planteamos que un gobierno que cierra hospitales y ataca la educación pública, a los comedores populares y los jubilados no puede seguir en el poder. El método que tenemos para hacerlo es la huelga general. El camino lo marcan los sectores universitarios y tenemos que superar a las burocracias sindicales cómplices de Milei. En las calles nos sacaban de las manos los volantes que decían “Fuera Milei”. Las trabajadoras no aguantamos más, ¡tenemos que organizarnos!

En la vereda opuesta, la orientación de las peronistas que participaron se redujo a un intento de desactivar las autoconvocatorias que impulsan los trabajadores que ven que sus sindicatos no luchan o a deslegitimar los planes de lucha de las direcciones combativas. Un ejemplo de esto fue el ataque que recibieron los Sutebas multicolor, que trazan un plan de lucha propio contradictorio con la política de Baradel que defiende a Kicillof y colabora con su ajuste.

Este sector dice, en línea con Máximo Kirchner, que la salida a este gobierno pasa por no patalear y llama a formar listas para ir a las urnas en 2025. Confiar en el Congreso se demostró nuevamente como un fracaso, porque Milei tiene cómplices para hacer pasar sus planes de ajuste en todos los partidos, incluido el PJ. Es un camino de derrota y desmoralización. La brutalidad de la avanzada mileísta requiere tomar medidas de fondo: organizarnos y luchar, no tener dilaciones por cálculos electorales.

Colocar el problema de la interna del PJ como vienen haciendo, entre Kicillof-Quintela y CFK, como parte de una vía para frenar al gobierno, no es más que una impostura. La clave está en la organización independiente, en la deliberación y los paros; es lo que impulsan los Sutebas combativos contra las paritarias de hambre del gobernador de la provincia de Buenos Aires. Tampoco respuesta alguna es CFK, que en sus apariciones defendió férreamente la reforma laboral que esquila derechos al conjunto de la clase obrera. Ni hablar de Quintela, gobernador de la provincia que ha generado uno de los casos que sacudió de fondo al movimiento de mujeres en los últimos tiempos: el de Arcoiris, niña abusada por su progenitor, funcionario judicial riojano, que contó con el amparo total del Estado provincial que ha perseguido a su madre protectora.

Las mujeres y diversidades no podemos perdernos en internas de los partidos que han gobernado arruinando las condiciones de vida de los trabajadores con recetas fondomonetaristas, contribuyeron al ascenso de Milei y ahora colaboran con él. Necesitamos volver a ser el tsunami verde que tomó las calles y conquistó reivindicaciones tan importantes como el derecho al aborto legal y gratuito.

Preparemos un gran 25N, día internacional contra la violencia de género, y salgamos a las calles en todo el país. Enfrentemos al gobierno con la huelga general. ¡Fuera Milei!

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